La Fed alborotó los mercados
El miércoles concluyó la reunión de política monetaria de la Reserva Federal y tuvo efectos bastante negativos en los mercados financieros mundiales, en especial en Estados Unidos.
En el comunicado se informó que no haría cambios a la política monetaria actual; sin embargo, en la rueda de prensa posterior al comunicado, las respuestas de Jerome Powell (su presidente) crearon una enorme volatilidad en los mercados. En realidad, lo que influyó en estos movimientos fue lo siguiente: en el comunicado se dijo que las tasas de interés podían empezar a moverse hacia arriba en 2023, cuando hacía un mes se había indicado que esto podía suceder hasta 2024.
Lo anterior fue suficiente para que el rendimiento de los bonos del tesoro a diez años de plazo subieran casi 10 puntos base, que el dólar se fortaleciera y en el caso de México la moneda se devaluara de 20.09 a 20.30 pesos por dólar; además, en la famosa tabla de puntos, los miembros que pronosticaban un alza en 2023, pasaron de 4 el mes pasado a 7 en esta ocasión. Pero lo que más afectó fue que a una pregunta expresa de un reportero en relación a la inflación esperada, Powell dijo que si las inflación futura permanecía más tiempo del estimado y subía por encima de las expectativas de la Fed, ésta pondrá a trabajar todos los mecanismos a su alcance para controlar este fenómeno. El mercado leyó entre líneas que esto podía significar reducciones en la compra de bonos más tempranas de lo estimado y que el ciclo de tasas de interés en cero podía terminar. Esto también ocasionó pérdidas en los índices bursátiles de Estados Unidos, con posibles repercusiones en las bolsas mundiales.
Desde mi muy particular punto de vista, la reacción de los mercados fue un poco exagerada porque mantengo la impresión que la inyección de liquidez a través de la compra de bonos seguirá sin cambio una buena parte de lo que resta del año y que la tasa de interés se mantendrá cerca de cero durante todo este año y buena parte de 2022. En resumen, la política monetaria en Estados Unidos continuará siendo laxa por los próximos 18 meses. Claro, estas son estimaciones personales.
Al final debemos reconocer que las decisiones futuras de la Reserva Federal serán datos dependientes, pero tomando en cuenta que los buenos resultados económicos que se están viendo ahora están alentados por los estímulos monetarios vigentes y que estos solo se reducirán cuando la economía en todos sentidos pueda seguirse expandiendo por sus propios méritos.
Es importante señalar que en lo que se refiere a creación de empleos aún existen rezagos muy importantes que tardarán más de un año en materializarse, esto entre algunas otras cosas. Es prudente esperar aquel os mercadosasimilen el comunicado de ayer para ver realmente su significado; anticiparse a tomar decisiones puede resultar contraproducente.