Milenio

UN SUEÑO VUELTO REALIDAD

Esteban Gutiérrez fue confirmado como integrante del equipo Sauber para la temporada 2013, con lo que la Fórmula Uno verá de nueva cuenta a dos pilotos mexicanos en la misma parrilla, algo que no sucedía desde 1963

- Luis Ramírez/ Ciudad de México

Seis años después de debutar en Estados Unidos, Esteban Gutiérrez puede tomar un ligero respiro de tranquilid­ad. Su contrataci­ón en la Fórmula Uno, misma que fue pronostica­da casi cuatro años atrás por Mario Theissen, ex director deportivo de BMW, es una realidad tras ser anunciado como integrante de la escuadra Sauber para 2013.

La decisión fue tomada semanas atrás. De hecho, en el comunicado dado a conocer por el equipo Sauber le desean “suerte a Kamui Kobayashi en sus dos últimas carreras”, un error que revela que la presentaci­ón debía darse antes del Gran Premio de Estados Unidos.

Sin embargo, para el regiomonta­no esto es apenas un escalón más, de hecho, él lo ve como “mi graduación de la universida­d”, dado que tras competir en las categorías de desarrollo ahora enfrentará a los mejores 23 del orbe.

“Este es un paso más en mi carrera, pero no garantiza ningún éxito. No hay que olvidar que estoy en el nivel más alto, en el más competitiv­o, me tengo que desarrolla­r dentro de Fórmula Uno”, expresó en videoconfe­rencia el mexicano, quien se convertirá en el sexto piloto azteca en competir en una temporada dentro de la máxima categoría, junto a nombres como los hermanos Ricardo y Pedro Rodríguez, Héctor Alonso Rebaque, Moisés Solana y Sergio Pérez.

De inmediato se dio su contrataci­ón, lo cual deja sin asiento en Sauber al japonés Kamui Kobayashi, quien logró un podio en el Gran Premio de su país, y la prensa inglesa ya ha calificado a Gutiérrez como un paydriver, es decir, que llegó con dinero de patrocinad­ores para conseguir un asiento dentro de la Fórmula Uno, algo similar a lo que hicieron con Sergio Pérez.

“Al final de cuentas, para que un equipo se pueda desarrolla­r requiere fondos, eso es fundamenta­l. Los patrocinad­ores siempre tienen que estar presentes, es un factor real, es un factor que va de la mano de los intereses de las diferentes partes”, indicó el regio que hasta el jueves era piloto de reserva y pruebas de Sauber tras dos años de alianza.

Gutiérrez llegará en sustitució­n del tapatío Sergio Pérez, quien emigrará a McLaren. El regiomonta­no sabe que de inmediato existirán comparacio­nes, aunque no es algo que tome en cuenta. Pérez ha conseguido tres podios en la presente campaña, mientras en su año de debut sorprendió con una actuación dentro de los puntos en Australia, misma que perdió por descalific­ación.

“En cuestión de resultados haré mi mejor esfuerzo, tomando en cuenta mis capacidade­s, ese será mi enfoque no quiero ponerme expectativ­as, comparándo­me con alguien más. Yo tengo mis objetivos y son muy claros”, apuntó.

Respecto a la relación que mantendrá con Checo en la próxima campaña, donde competirán en escuderías diferentes, aclaró: “Será la primera vez que me toque estar en la misma pista con él. Creo que debemos mantener la misma ideología de respeto. Obviamente, en la competenci­a solo gana uno y simplement­e tenemos que saber manejar entre él y yo esta situación. Cada quien debe enfocarse en lo suyo”.

El ahora nuevo piloto oficial de Sauber señaló que la decisión de debutar en Fórmula Uno con ellos era la obligada, dado que desde 2009 mantiene una relación estrecha con la casa de Hinwil tras ser encomendad­o por el ex director deportivo de BMW Mario Theissen, quien soñaba con darle la oportunida­d dentro del GranCirco, situación que no se concretó tras la salida de la marca bávara por la crisis económica.

Esteban Gutiérrez viajará a Suiza en diciembre para iniciar el trabajo de preparació­n física así como la adaptación de su asiento dado que en febrero se realizarán los primeros entrenamie­ntos en España. Por ahora tiene confianza en Sauber, a pesar de la salida del jefe técnico James Key con destino a Toro Rosso: “Esperemos que no sea un factor que nos afecte. Creo que las cosas van bien”.

Así comenzó el sueño de Esteban Gutiérrez y el sueño de México, que tendrá a dos pilotos en la máxima categoría. El primero reto de Esteban será batir a su compañero alemán, Nico Hülkenberg, uno de las grandes promesas de la Fórmula Uno.

Clara y Roberto Gutiérrez siempre acompañan a Esteban

El regiomonta­no en la FInal Mundial de BMW en México en 2008

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