PGR desecha detectores; la Sedena adquiere 742
El Ejército gastó 21 mdd en esos equipos, aunque la Procuraduría no pudo comprobar “científicamente” su eficacia
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) gastó el sexenio pasado más de 21 millones de dólares en la compra de 742 dispositivos de “detección molecular” GT-200, cuya utilidad para ubicar explosivos, armas y narcóticos fue puesta en duda en otras áreas del gabinete de seguridad.
La Procuraduría General de la República (PGR) prohibió a finales de la anterior administración, mediante una circular, el uso en operaciones anticrimen de este aparato fabricado en Reino Unido por la empresa Global Technical, LTD y que en México distribuyó la compañía SEGTEG S.A. de C.V.
El empresario inglés Gary Bolton, dueño de Global Tecnhical, enfrenta juicio penal por fraude en su país por manufacturar su equipo y venderlo al mundo. En México, la PGR mantiene abierta una investigación por la compra de los aparatos y, al parecer, una persona fue arraigada.
De acuerdo con servidores públicos de la dependencia, cuatro localizadores adquiridos por la institución se dejaron de utilizar “al no comprobarse científicamente que funcionaran”.
Informes de la Sedena obtenidos a través de solicitudes de transparencia revelan que en la administración de Felipe Calderón se adquirieron los GT-200 por un precio total de 21 millones 757 mil 800 dólares.
Entre 2007 y 2008 se compraron 521 aparatos con un costo unitario de 27 mil dólares, mientras que en 2010 se adquirieron 221 a un precio de 34 mil 800 dólares cada uno.
Las especificaciones técnicas de los detectores señalan que funcionan a través de “resonancia molecular de las sustancias”, cuentan con 12 tarjetas sensoras con una vida útil de 10 años y pueden operar con cuatro tarjetas a la vez.
Desde 2005, la PGR, Petróleos Mexicanos y la Secretaría de Marina Armada de México contaban con estos equipos que se emplean “rutinariamente” en puestos de seguridad carreteros, aeropuertos, puestos fronterizos y terminales de autobuses, señala la Sedena.
El instituto armado sostiene que los detectores moleculares son empleados “como primera herramienta de búsqueda e inspección en vehículos, equipos y contenedores para detectar cocaína, heroína, mariguana, anfetaminas, metanfetamina, opio, éxtasis, explosivos, armas de fuego, cargadores, municiones y otros”.
Refiere que este dispositivo “señala un marcaje ‘positivo’ que posteriormente es verificado por un revisor con apoyo de un binomio canófilo, llevándose a cabo una inspección física de los objetos antes descritos que se encuentren dentro del área de alcance del citado detector molecular”.
SEGTEC S.A. de C.V se ostenta como “presentante exclusivo” en México del Sistema Programable de Detección Molecular GT-200, con sus oficinas centrales en San Ramón, 19, colonia del Valle, del DF.
De las características básicas de los aparatos refiere: “El equipo fue desarrollado en Inglaterra para la detección de sustancias: drogas, explosivos, armas, cartuchos, seres humanos, entre otras sustancias (sic); su rango de operación es de aproximadamente 300 metros cúbicos, de- pendiendo del área de búsqueda. “El sistema opera por medio de bajos niveles de energía asociados con Paramagnetismo y Diamagnetismo. El equipo puede programarse para buscar sustancias de manera individual o combinadas, seleccionando la tarjeta de sensor apropiado. El sistema programable de detección molecular funciona a través de la resonancia molecular de la sustancias, una vez identificada, localiza su ubicación. Utiliza la energía del cuerpo humano para su funcionamiento, por lo tanto no requiere ningún tipo de consumibles-baterías”.