Hacia el reto más difícil
De la mano de LeBron James, los Cavaliers consumaron la barrida sobre los Hawks de Atlanta para calificar a la Final de la NBA por primera vez desde 2007; hoy, los Warriors van por su pase En este equipo tenemos todo lo necesario para ganar. Nos faltan cu
CMayo de 2015 leveland jugó como si no hubiera mañana y ahora tendrán un descanso de ocho días para parchar sus heridas y comenzar a preocuparse para el más grande reto en la historia de la franquicia. Los Cavaliers derrotaron 118-88 a los Hawks de Atlanta para alzarse 4- 0 en las Finales del Este y ganar pasaje a su segunda Final, primera desde 2007.
LeBron James anotó 23 puntos, ganó 9 rebotes y repartió 7 asistencias para los Cavs sin siquiera jugar un minuto en el cuarto periodo en el que los de casa limpiaron la banca y los titulares se convirtieron en porristas en la paliza más escandalosa a un equipo en la historia de la franquicia de Ohio.
Los Cavs ahora tendrán ocho días de descanso antes del inicio de las Finales de la NBA ante los Warriors de Golden State o los Rockets de Houston. Golden State lidera la serie 3-1, con el Juego 5 a disputarse esta noche.
“Estamos felices de haber ganado”, dijo Matthew Dellavedova, el armador australiano que resultó clave en las victorias 2 y 3, ante la ausencia del allstar Kyrie Irving., “Hemos estado bajo gran adversidad, por esa razón este triunfo nos cae muy bien”.
Con los rumores previos al juego de que LeBron James no participaría debido a las pequeñas lesiones sostenidas a lo largo de los playoffs, pero más que nada debido a cansancio, la posibilidad de que el coach David Blatt le diera descanso a su superestrella aumentó conforme se acercaba la hora del tip-off.
Fue hasta momentos antes del partido cuando tanto James como Kyrie Irving, que perdió los dos anteriores partidos mientras se atendía lesiones de rodilla y pie, aparecieron en la plantilla titular.
Y ambos salieron con energía y gran efectividad, los Cavs superaron 32-20 a su adversario en el primer cuarto y su intensidad no varió durante todo el partido, repitiendo todo lo que les había salido bien en los primeros tres encuentros.
Esta vez no dieron oportunidad a Atlanta de levantarse de una dolorosa derrota en tiempo extra en el partido anterior, la idea de los de casa era fi niquitar su compromiso, bañarse en champaña y descansar para la crucial cita con su más probable adversario, los Warriors, en la Final NBA.
El mensaje era claro: Cleveland no quería volver ni por equivocación a Atlanta y perder uno de esos preciosos días de descanso
Delantero de los Cavaliers
reparador antes de la Final de la NBA, a partir del 4 de junio.
Los Cavs sacaron 20 puntos de ventaja en la primera mitad y en lugar de disminuir su intensidad defensiva, la aumentaron para el tercer cuarto, en que superaron 26-18 a los Hawks y construyeron delantera de 25 puntos rumbo al cuarto periodo.
La Quicken Loans, tapizada del color vino y oro que caracteriza a la franquicia, saltaba de emoción en las gradas ante el tiempo de “basura” en que la banca consumaba la barrida del equipo con el mejor registro de la Conferencia Este.
Y a coro, LeBron y compañía felicitaban a jugadores que no habían tenido siquiera un minuto en los playoffs, saltando ante cada nueva canasta en un plan de humillación a los Hawks, cuyos titulares solo observaban con mirada ausente desde la banca.
Cleveland no ha ganado un título en alguna de las ligas profesionales más importantes en 50 años, los Cavaliers son uno de los equipos que no tienen un título NBA en sus vitrinas. Pero ahora tendrán otra oportunidad.
LeBron James
HOUSTON
HAWKS
GOLDEN STATE
no solo asistirá a su quinta Final consecutiva de la NBA, lleva por segunda vez a los Cavaliers a una, la primera de la franquicia desde que fueron barridos en cuatro juegos por los Spurs de San Antonio en 2007. James dejó el equipo en 2010 y en esos años los Cavs no calificaron a playoffs.