Está en chino que HSBC halle salvación en Asia
Obstáculos regulatorios que dificultan el trabajo de la banca extranjera limitarán el potencial de su crecimiento en China continental
Un elemento clave de la nueva estrategia de HSBC es dar un giro a Asia, en particular al sur de China, pero los analistas dicen que los obstáculos regulatorios de larga data que dificultan el trabajo a los bancos extranjeros en este país van a limitar el potencial de crecimiento del banco en China continental.
Previo a la entrada de China a la Organización Mundial del Comercio en 2001, muchos banqueros locales temían que los bancos extranjeros más grandes y más competitivos pudieran aplastar a sus contrapartes chinas, un temor que encarna un dicho común: “Llegó el lobo”.
Al final resultó que los bancos extranjeros llegaron a China como corderos al matadero. Mientras la economía china creció a una velocidad vertiginosa, los bancos del país vieron que sus utilidades se dispararon, mientras que los extranjeros, incluidos Bank of America Merrill Lynch, Citigroup, Deutsche Bank, JPMorgan Chase y HSBC, enfrentaron una serie de innumerables regulaciones que frenaron su crecimiento.
En su presentación del martes, Stuart Gulliver, el presidente ejecutivo de HSBC, citó a la región del delta del río de las Perlas, en la provincia sureña de Guangdong, como un área de fuerte potencial de crecimiento para el banco; señaló sus estrechos vínculos económicos y geográficos con Hong Kong y un producto interno bruto mayor que el de Indonesia.
HSBC busca aumentar su utilidad antes de impuestos con la región, principalmente con financiamiento al comercio, hipotecas de vivienda, tarjetas de crédito y gestión patrimonial, pero eso no convence a los analistas. “China no va a salvar a HSBC. Ésta es una organización tan grande a escala mundial que sin importar los nuevos negocios que realice en China, nunca van a ser suficientes para compensar la carga de América Latina, Europa y Estados Unidos”, dijo James Antos, analista de banca en Mizuho Securities Asia.
A continuación un resumen de la posición de los bancos extranjeros en China y los obstáculos regulatorios que enfrentan.
A finales de 2013, 42 bancos extranjeros operaban en China, incluidos los más grandes del mundo, controlaban 2.56 billones (millones de millones) de yuanes (413 mil millones de dólares) en activos, un mero 1.7 por ciento del total de activos bancarios en China continental y por debajo del porcentaje de 2011 de 1.9 por ciento, de acuerdo con los últimos datos oficiales.
CIFRA PÁLIDA
HSBC operaba 198 sucursales de marca propia en China continental, además de las 50 sucursales de Hang Seng Bank, un banco con sede en Hong Kong, del que HSBC tiene una participación de 62 por ciento. Eso se compara con un total de 947 sucursales de bancos extranjeros. La cifra palidece cuando se compara con la extensa red de sucursales de los bancos locales, Industrial and Commercial Bank of China, el más grande del país, opera más de 17 mil sucursales.
Los bancos extranjeros emplean a 45 mil trabajadores, de un total de 3 millones 600 mil empleados en el sector bancario de China, de acuerdo con los datos del gobierno. HSBC, por su parte, emplea a 21 mil personas en sus operaciones en el continente, de acuerdo con su informe anual.
Los bancos extranjeros obtuvieron una utilidad combinada después de impuestos de 2 mil 300 millones de dólares (mdd) en 2013, solo 0.8 por ciento del total de la industria. El rendimiento sobre los activos para los bancos extranjeros fue de solo 0.6 por ciento en el primer trimestre de 2015, menos de la mitad de la relación de 1.29 por ciento de los grandes bancos comerciales domésticos. El rendimiento sobre el capital invertido para todos los bancos comerciales fue de 19.2 por ciento en 2013, en comparación con 5.1 por ciento de los bancos extranjeros.
Por su parte, HSBC generó 978 mdd en utilidades antes de impuestos de sus operaciones en China continental en 2014, y mil 870 millones de dólares
0.6% Rendimiento de los bancos extranjeros, contra 1.9 por ciento las marcas locales
42 Bancos extranjeros operaban en el país asiático al cierre de 2013
198 Sucursales de marca propia tiene el grupo financiero inglés, y 50 en Hong Kong
adicionales de su participación de 19 por ciento en Bank of Communications, la quinta institución de crédito más grande de China por activos y otras filiales en el extranjero. En conjunto, las utilidades del banco que se relacionan con China, de 2 mil 950 mdd, representaron 16 por ciento de la utilidad total antes de impuestos.
PARTICIPACIÓN EN YUANES
A los bancos extranjeros solo se les permite participar en toda la gama de negocios en yuanes desde 2007. Hasta finales del año pasado, las reglas también requerían que los bancos extranjeros operaran sus negocios en moneda extranjera durante tres años antes de obtener una licencia para hacer negocios en moneda china.
Dada esta ventaja inicial, muchos analistas dicen que los bancos extranjeros ahora tendrían dificultades para competir incluso si el sector se liberaliza de forma masiva.
En la actualidad, los bancos extranjeros todavía necesitan el permiso de los reguladores para abrir cada una de sus nuevas sucursales. Los bancos extranjeros se quejan de que el proceso de aprobación a menudo toma meses o años. Los reguladores también obligan a los bancos extranjeros a establecer operaciones en zonas desatendidas como condición para aprobar nuevas sucursales en regiones desarrolladas.
A las instituciones financieras extranjeras también se les limita su capacidad para financiarse a través de sus casas matrices en el extranjero. Cada año los reguladores otorgan una cuota agregada de deuda extranjera tanto para el largo como para el corto plazo, que después se reparte entre los bancos y empresas extranjeras y locales.
Ya que el mercado accionario chino experimenta un auge, los corretajes de valores obtienen sus utilidades en crecientes volúmenes de operación y en el resurgimiento del mercado de ofertas públicas iniciales. Pero los inversionistas extranjeros han perdido, todavía sujetos al tope de propiedad de 49 por ciento en títulos de empresas conjuntas. El mismo tope se aplica a las casas de gestión de fondos. “Los bancos extranjeros en China enfrentan tantas restricciones. Sus perspectivas de desarrollo no mejorarán, a menos de que los reguladores suavicen su control”, dijo Zou Hengchao, analista de banca de China Merchants Securities, en Shanghái.