Alejarse, piden Airbnb y Uber a las autoridades
Ambas empresas impulsan un plan de “regulación delegada” para trabajar en paz
En una reunión en Washington donde Uber —la compañía para solicitar taxi mediante una aplicación— promovió la “regulación delegada” como la forma correcta para que la dejen tranquila, junto con Airbnb —aplicación para rentar casas por periodos cortos— aconsejaron a los reguladores de Estados Unidos mantenerse lejos de sus negocios.
Altos ejecutivos de las dos empresas estuvieron en la capital estadounidense para dirigirse a los funcionarios de la Comisión Federal de Comercio de EU (FTC, por su sigla en inglés), que examinan la forma en que se debe manejar la seguridad y la competencia en la llamada “economía de compartir”.
Sus estridentes argumentos indican que las dos empresas privadas, que se encuentran entre las de mayor valoración de Silicon Valley, tratan el trabajo de la FTC como una seria amenaza para sus operaciones.
Ashwini Chhabra, director de desarrollo de políticas de Uber, dijo que la nueva tecnología permite formas más efectivas de autorregulación —o “regulación delegada”— a las empresas y clientes.
“De la misma forma en que la gente habla algunas veces de que el software se come al mundo, existe esta forma donde la tecnología puede comerse a la regulación”, dijo en un taller de la FTC el martes.
“Hoy en día no necesitas las mismas reglas del manual que tenías en 1972 cuando no había teléfonos celulares y la línea fija que tenías era la única forma en que podías solicitar un taxi para que te recogiera”.
Uber busca recaudar ahora otros mil 500 millones de dólares de su valoración de 50 mil millones de dólares, dijeron personas cercanas a la compañía, mientras que Airbnb pretende levantar mil millones de dólares de su valoración de 20 mil mdd de principios de este año.
Con las dos empresas a ritmos de crecimiento saludables, es probable que la regulación sea una fuerte preocupación que pesa en los posibles inversionistas, ya que ambas se dirigen hacia las cotizaciones públicas en la bolsa de valores, que muchos observadores esperan a finales de este año o en 2016.
La FTC destacó que no hay una conspiración para impulsar una serie de medidas coercitivas contra los negocios peer-to-peer, algunos de los cuales enfrentan una feroz oposición de las empresas establecidas a las que amenazan.
Matthew Daus, ex presidente de La Comisión de Taxis y Limosinas de la Ciudad de Nueva York, que tuvo choques con Uber, dijo que las empresas para compartir transporte enfrentaron “30 o 40” demandas en EU donde se alega un comportamiento anticompetitivo.
En la reunión, Airbnb recibió críticas de Vanessa Sinders, de la American Hotel and Lodging Association, quien la acusó de facilitar “hoteles ilegales”.
David Hantman, director de
La FTC no es ni defensor ni detractor de algún modelo de negocio en particular
políticas públicas globales de Airbnb, dijo que las plataformas en línea redujeron la necesidad de intervención del gobierno.
“Ahora aumentan los casos en que los sistemas de reputación en línea, que recompensan el buen comportamiento y castigan al malo, ayudan en gran medida al propósito que por lo general atienden las regulaciones”, dijo.
Los ejecutivos de Airbnb y Uber no se oponen a todas las formas de regulación, pero dijeron que deben ser “justas” e “inteligentes”.
Airbnb tiene una posición más conciliadora con los reguladores, mientras que Uber es más agresivo al realizar su modelo de negocio a través de vacíos legales. Esto empezó a cambiar el año pasado cuando Uber contrató a David Plouffe, ex asesor del presidente, Barack Obama.
Chhabra señaló que una gran parte de la “regulación delegada” la escribió Arun Sundararajan, de la Universidad de Nueva York. También conocida como autorregulación, tiene mala fama por las repetidas crisis en el sector de servicios financieros.
Maureen Ohlhausen, comisionada de la FTC, dijo que el regulador quiere conocer más acerca de la economía de compartir, pero agregó: “No son ni defensor ni detractor de algún modelo de negocio en particular”.