México alista misión experimental a la Luna
La Agencia Espacial Mexicana, además de otras naciones, pactó con una empresa de EU enviar una nave al satélite de la Tierra en dos o tres años
La Agencia Espacial Mexicana (AEM) firmó un acuerdo con la empresa Aerobotic con la finalidad de llevar a cabo la primera misión a la Luna por parte de nuestro país, la cual consistirá en enviar un experimento que permita el desarrollo científico nacional.
En entrevista con MILENIO, Javier Mendieta, director general de la AEM, destacó que se trata de un experimento desarrollado y diseñado en México, al cual se le denomina “carga útil”, y que surgió hace unos meses en un taller de astrofísica realizado en el país. “Conocimos las oportunidades que se tienen de utilizar esta nave (de Astrobotic) que va a ir a la Luna llevando una serie de experimentos de varios países, lo que minimiza los costos”, detalló.
Señaló que con la empresa espacial Astrobotic, que se encuentra en Pittsburgh, EU, tienen firmada una carta de intensión que permite que se junten con un grupo de investigadores internacional para que en un solo vehículo se acomoden todos los experimentos, además se puedan compartir los resultados de todos ellos.
El proyecto será seleccionado este 2015 y se iniciará en 2016 para que, en el siguiente año, se realice la integración y pruebas de calificación, por lo que será entre 2017 y 2018 cuando se haga el lanzamiento, alunizaje e inicio de los experimentos.
Mendieta explicó que es un hecho que el lanzamiento tiene un precio, por lo que la forma de reunir fondos se hizo en conjunto con el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) a través de una convocatoria abierta para desarrollar un concurso entre los grupos de investigadores, los cuales hicieron una propuesta para elegir “el experimento en la Luna”.
En la convocatoria se recibieron alrededor de 17 prepropuestas, mismas que han avanzado en su desarrollo y de las cuales elegirán al ganador en un concurso; los jueces serán expertos nacionales e internacionales.
“Una vez seleccionado, se espera que con el fondo de lo recaudado sucedan dos cosas: una, que el ganador desarrolle y construya en breve el experimento y dos, que se pague el costo del envío a la Luna, en modo compartido con otras naciones, de la misma nave espacial”, explicó.
El monto de los recursos necesarios aún se evalúa por parte de la AEM, aunque dicha inversión, que el gobierno mexicano realizará para el conocimiento, la experimentación y el desarrollo del talento mexicano, tiene que recuperarse al final de todo el proyecto.
El directivo destacó que los países desarrollados han demostrado que por cada dólar que se invierte en el espacio se recuperan entre cuatro y 20; cuatro en el caso de los proyectos más experimentados y 20 en los más desarrollados, como son los de telecomunicaciones espaciales vía satélite.
La convocatoria realizada para la misión incluye temas que pueden estar relacionados con ciencias planetarias, movimientos telúricos en el satélite natural, cómo interactúa éste con la Tierra, observación del planeta y ciencias astrofísicas de la Luna.
Además, temas relacionados con la biología como el comportamiento microbiológico o el desarrollo tecnológico en áreas como la robótica, las comunicaciones y sistemas que pueden constituir la instrumentación de dicha misión.
Mendieta explicó que los países desarrollados han aprovechado todas las oportunidades que han tenido de experimentación de vuelos no tripulados para desarrollo de la robótica, celdas solares, comunicaciones y otras cuestiones que después encuentran aplicación en la Tierra.
“Si bien México tiene varios años experimentando en el espacio, esta nueva misión nos posiciona en dos perspectivas; primero, la Luna presenta un reto muy importante para desarrollo tecnológico, y dos, esto se capitalizará en futuras misiones y se aplicará para el desarrollo del capital humano, ya que genera patentes, invenciones, nuevas empresas espaciales y el fortalecimiento de las existentes”, destacó.
El mercado de la tecnología aeroespacial en México está creciendo desde hace 25 años de manera vertiginosa en más de dos dígitos anualmente; la misión a la Luna podrá seguir capitalizándolo para incrementarlo.
Resaltó que con ello “México sería el primer país latinoamericano que hace experimentos en la Luna, la cual se hace cada vez más interesante para la investigación espacial, porque en 1972 fue la última vez que un hombre estuvo en ella, y ahora hay una tendencia de regresar, sobre todo de la Agencia Espacial Europea, que tiene una meta tecnológica para el conocimiento y exploración e incluso para establecer, en algunas décadas, bases humanas”. M