Menos de 500 Sofom, aptas a nueva regulación
Hay 3 mil 35 sociedades financieras de objeto múltiple, lo que significa que con estas reglas quedará solo 16%: especialistas
La estimación generalizada es que una vez que termine el plazo para que obtengan su certificación, en el mercado quedarán alrededor de mil sociedades financieras de objeto múltiple no reguladas (Sofom NR) operando, pero otros especialistas menos positivos afirman que la cifra final no llegará a 500.
Hugo Villanueva, presidente de Toka Investment, una de las pocas financieras de este tipo que ya logró la renovación de su registro, estimó que el número de Sofom que librarán la nueva regulación, difícilmente superará el millar, e inclusive aseguró que serán solo entre 400 y 500.
Según el último conteo divulgado en el Buró de Entidades de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), hay 3 mil 35 Sofom, lo que significa que de concretarse esta estimación, quedarán solo 16 por ciento.
Oliver Ambía, director de Administración Financiera del Tecnológico de Monterrey, coincidió con la estimación de Villanueva, y agregó que es una noticia que favorece al sistema financiero, dado que habla de una depuración donde quedarán solo los que estén haciendo las cosas bien.
La creación de las Sofom fue en 2006, pero fue hasta 2008 cuando la figura comenzó a despegar como consecuencia de la laxa o nula supervisión a la que eran expuestas, al grado que en pocos años llegaron a ser más de 4 mil 500, lo que las colocó como la figura con más presencia en el país. “Todo parece indicar que la autoridad se dio cuenta de que no es bueno para el sistema tener tantas entidades que no son supervisadas y decidió dar marcha atrás, lo cual desde mi punto de vista es bueno y creo que van por el camino correcto”, dijo el presidente de Toka, Sofom especializada en vales de despensa.
Como parte de la reforma financiera que entró en vigor a inicios del año pasado, se endureció la supervisión de las autoridades, y se estableció que, para seguir operando, las Sofom debían aprobar un examen para comprobar que se alinean a las normas adecuadas para prevenir el lavado de dinero.
Dicha evaluación se realiza ante la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, que de no encontrar anomalías, da su aprobación y otorga una constancia que las financieras deben presentar ante la Condusef, que es la encargada de renovar de manera oficial su certificación como Sofom, proceso que llega a su fin el próximo 4 de julio.
EL COSTO DE LA CERTIFICACIÓN
Para cumplir con dicha regulación, que es similar a la de los bancos, las Sofom deben contar con sofisticados esquemas antilavado, los cuales son ofrecidos por firmas de software, pero dependiendo el tamaño de la Sofom llegan a costar entre 350 y un millón de pesos.
Estos elevados costos han provocado que muchas Sofom simplemente dejen de operar, que otras tantas se vendan o se fusionen y que muchas se conviertan en sociedades mercantiles, lo que les permite seguir dando crédito dado que cualquier persona lo puede hacer, pero sin supervisión de autoridades financieras.
Al respecto, Hugo Villanueva destacó que si bien es una práctica de competencia desleal para aquellas que sí obtengan la certificación, no es ningún delito dado que, a diferencia de captar dinero, ninguna ley impide dar crédito; no obstante, es consciente que las autoridades deberían hacer algo para regular el sistema.
Se estima que dentro de las 500 Sofom que lograrán sobrevivir, se encuentren las que pertenecen a diversas asociaciones de renombre, donde se encuentran las entidades con mayor solvencia económica, tales como las más de 100 que tiene la Asociación de Sociedades Financieras de Objeto Múltiple, las más de 20 de la Asociación Mexicana de Empresas de Nómina o las casi 40 que conforma la Asociación Mexicana de Entidades Financieras Especializadas. m