Conduce BMW la fábrica del futuro
La gente trabajará con robots y dejará la mano de obra a las máquinas
BMW llevó el plan de las oficinas abiertas a un nivel diferente. En la fábrica de Leipzig de la automotriz en el este de Alemania, un desfile de vehículos recién salidos de la línea de ensamble pasa por encima de las cabezas de los empleados de oficina como un recordatorio constante del negocio en el que se encuentran.
Esa será la fábrica del futuro, de acuerdo con Arup, la consultora de ingeniería con sede en Londres, donde los límites entre los empleados de administración y los obreros se van a romper.
El grupo analizó las plantas más avanzadas del mundo para exponer su visión del futuro de la fabricación, que contribuye con 6.7 billones (millones de millones) de dólares a la economía mundial.
De acuerdo con Arup, la planta del futuro tendrá que hacer mucho más que producir bienes. Tendrá que ser tan flexible como los trabajadores. Las nuevas formas de manufactura —como la impresión en 3D— le permitirán a las fábricas regresar a entornos difíciles, como el centro de una ciudad. La gente trabajará codo a codo con robots, y actuarán como supervisores de alta tecnología y dejarán la mano de obra a las máquinas.
“La línea entre trabajadores administrativos y obreros se volverá más borrosa, con un creciente enfoque en el ambiente de la fábrica que facilite la colaboración y la innovación a lo largo de la cadena de suministros y a través de la línea de producción”, señala el informe. “A medida que las funciones de los empleados continúan adaptándose y fusionándose, la configuración de las fábricas tendrá que cambiar para reflejar estos nuevos patrones de trabajo”.
El desarrollo del “internet industrial” creará un piso de fabricación donde las máquinas se comuniquen entre sí y se configuren ellas mismas sin la necesidad de la intervención humana. Las fábricas se construirán mediante el uso de módulos, que les permita ampliarse o reducirse de acuerdo con la demanda. Se diseñarán para que se reciclen al final de su vida útil.
PLANTA DE CRISTAL
Los equipos serán capaces de configurarse a sí mismos, sin necesitar la intervención humana
Una fábrica que identificó Arup utiliza vigas de madera ligeramente más gruesas en su estructura para que se puedan reducir y reutilizar, dijo Josef Hargrave, uno de los autores del informe.
Arup sugiere que algunas fábricas incluso pueden convertirse en atracciones para visitantes por derecho propio, como una forma que pueden utilizar los productores para reforzar sus marcas.
Los fabricantes de automóviles están a la vanguardia en estas fábricas tipo parque temático, según Arup. Los clientes del sedán de lujo Phaeton, de Volkswagen, pueden ver el proceso final de ensamblaje de su vehículo en la glassfactory (fábrica de cristal). Chrysler ofrece un recorrido de realidad virtual a su piso de producción, donde los visitantes pueden utilizar cascos para interactuar con la producción del Chrysler 200 2015.
Incluso empresas menos evidentes reconocen el valor de la experiencia del cliente. En una planta de Saunier Duval, en Nantes, el fabricante francés de tecnología de calefacción, ventilación y aire acondicionado le ofrece a los visitantes una película en 3D, de 360 grados, pantallas interactivas y una comida, señala Arup. Hargrave dice que la fábrica transparente ayuda a reforzar la lealtad, dado el deseo que tienen los clientes de nuevas experiencias y una variedad del producto.
La expansión del internet de las cosas también empieza a repercutir en el diseño y operación de las fábricas, señala el informe. Con más dispositivos móviles que seres humanos, la influencia de los productos y sistemas conectados se sentirá en los próximos años, de acuerdo con Hargrave, aunque la mayor cantidad de datos que se recolectan significa que esto tomará su tiempo.
“Se estima que las fábricas pueden reducir el costo de desarrollo de producto y ensamble hasta 50 por ciento y ahorrar 7 por ciento en capital de trabajo al integrar los grandes datos en sus operaciones”, señala el reporte.