El asunto del normalista militar “huele a infiltrado”, dice Barbosa
El coordinador del PRD en el Senado, Miguel Barbosa, dijo que al reconocer el Ejército que existía un militar en activo entre los 43 normalistas desaparecidos provoca “otro tipo de especulaciones” y expresó que ese hecho “huele a infiltrado”. “Para mí estaba infiltrado, yo no encuentro otra explicación. Si era personal activo del Ejército como se reconoció, si el Ejército le autorizó su ingreso a la normal de Ayotzinapa era para que la misión del integrante del Ejército no fuera aquella de irse como parte de los grupos radicales, grupos de movilización en los esquemas que eran más allá de la educación normalista”, señaló el legislador.
Destacó que los despliegues que se hicieron y se siguen haciendo de parte de los integrantes de la normal de Ayotzinapa no son parte de la educación de los maestros. “Entonces, qué hacía un integrante del Ejército, que bien puede ser parte de la matrícula de una normal, qué hacía yendo a Iguala dentro del grupo de normalistas que iban a hacer despliegue de movilización o divulgación política, qué hacía, cómo iba ahí, hay que decirlo con verdad también (…) tiene que explicarse mejor, porque me huele a infiltrado”.
Sobre la respuesta que dio el secretario de la Defensa, el general Salvador Cienfuegos, de que no permitiría que la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos entreviste a los elementos castrenses, Barbosa dijo que era un “error de estrategia”. “Yo diría que la salida a medios del Ejército, o en este caso el general secretario, siempre deja opiniones, siempre crea controversias. Creo que el Ejército se le ve mejor desde su posición que tiene, una institución que desempeña funciones de salvaguarda de la soberanía, del territorio. “Y hoy cuando lo meten a las calles al combate contra el crimen organizado, pues tiene mucho que decir, entonces, cualquier exposición mediática provoca controversia”, comentó.
Añadió que esta estrategia de medios de la Sedena no será la respuesta que esperan las organizaciones civiles ni la que la ciudadanía espera cuando el reclamo permanente es el respeto a los derechos humanos. “O sea, sí veo ahí un error de estrategia al tener una respuesta y se entiende a partir de lo que signifique el Ejército, por eso su exposición mediática siempre crea controversia y creo que no va bien”.
Cinefuegos confirmó que el soldado Julio Cesar López era uno de los 43 normalistas desaparecidos, y explicó que este elemento de las fuerzas armadas en activo tenía autorización de estudiar en la normal. m