Los mexicanos leen 5.3 libros al año
Ese promedio se divide en 3.5 leídos por gusto y 1.8 por necesidad, aún lejos de los 47 que constituyen el hábito en Finlandia
Alo largo de casi una década, la cifra más aceptada de lectura en México se refería al promedio de 2.9 libros al año. El dato se incrementó, y ahora, sgún la Encuesta Nacional de Lectura y Escritura 2015, es de 5.3 libros, dividido en 3.5 leídos por gusto y 1.8 por necesidad, aún lejos de los 47 que, en promedio también, se leen en Finlandia. “Todo lo que tiende a subir es muy bueno”, destacó Marina Núñez Bespalova, directora general de Publicaciones del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (DGP-Conaculta), para quien uno de los factores de que se haya dado el crecimiento es que la lectura ya es un hábito importante dentro de la familia y dentro de la escuela, amén de que los estímulos a la lectura y la oferta cultural se han multiplicado y “parece que están dando frutos”.
Sin embargo, la funcionaria advirtió de las dificultades de establecer un comparativo con la encuesta de lectura desarrollada en 2006, tan solo porque la metodología fue distinta, pues esta es la primera en la que se pregunta de manera distinta si el entrevistado lee por gusto o si lee por necesidad.
Al dar a conocer los principales indicadores de la encuesta, Núñez Bespalova resaltó que 44.3 por ciento de los entrevistados respondieron que leen libros por entretenimiento, cuando en 2006 la cifra fue de 9.2 por ciento; 30.5 por ciento para estudiar y 11.2 por ciento para trabajar; además, 60.5 por ciento afirmó que los maestros alentaron la lectura en su infancia, y 43.8 por ciento habló de la participación de los padres.
Y si bien 80 por ciento de los encuestados respondió que había leído un libro alguna vez, 18 por ciento señaló que nunca lo había hecho, lo cual permitirá desarrollar los programas de fomento a la lectura enfocados a esa población no lectora, destacó la editora ante el presidente del Conaculta, Rafael Tovar y de Teresa, además de José Carreño Carlón, director del Fondo de Cultura Económica (FCE), “Lo importante de la encuesta es qué aprendimos de ella, más allá de la cifra que estamos dando: se registra una diversificación en los materiales y formatos de lectura. El principal motivo de lectura en México es el entretenimiento, las plataformas y formatos digitales cada vez tienen más preferencia en la lectura. El estímulo de padres y maestros en la infancia es un factor muy importante en la formación de lectores”.
ESCRITURA
La encuesta de 2015, en la que se aplicaron 5 mil 845 cuestionarios entre una población de más de 12 años de edad, en zonas rurales y urbanas de toda la República, fue realizada por el Conaculta, con el apoyo de instituciones como el Centro de Investigaciones Académicas y Sociales del IPN, el Centro Regional para el Fomento del Libro en América Latina y el Caribe (Cerlalc), el Inegi y Funlectura, además de diversos especialistas, entre ellos Néstor García Canclini, Daniel Goldin o Roberto Igarza.
De acuerdo con la encuesta, de los que sí leen 57.3 por ciento se acerca a los libros, 55 por ciento a los periódicos, 44.3 por ciento a las redes sociales y 13.4 por ciento a los blogs; asimismo, se detalla que 88.6 por ciento de los que leen libros los prefieren en forma impresa, 3.3 solo digital y 10.1 por ciento en ambos formatos.
En el trabajo se puso énfasis también a la escritura, como una manera de reflexionar sobre qué tanto se entiende la lectura, donde se encontró que 34 por ciento de quienes sienten gusto por la lectura al mismo tiempo muestran empatía por la escritura.
Desde la perspectiva del presidente del Conaculta, Rafael Tovar y de Teresa, la encuesta permite contar con los parámetros adecuados para la definición de un Programa Nacional de Lectura y de la política pública al respecto, “no estar sobre las bases de la intuición, sino contar con datos muy concretos que nos ayudarán a diseñar la estrategia que se debe llevar a cabo”.