Milenio

Adiós al ídolo local

Lleyton Hewitt cerró una carrera de 18 años, al caer en la segunda ronda del Abierto de Australia ante Ferrer

- Agencias/Melbourne, Aus.

El australian­o Lleyton Hewitt, de 34 años y campeón de dos torneos de Grand Slam, ex número uno del mundo y una de las figuras más destacadas del circuito ATP (30 títulos), puso fin a su carrera profesiona­l con una emotiva despedida, tras disputar su último partido en su vigésima participac­ión en el Abierto de Australia.

La Arena Rod Laver vistió sus mejores galas para asistir al que podía ser —y lo fue— el último partido de una dilatada y exitosa carrera de uno de sus ídolos, quien planteó una batalla, como había anunciado, pero no pudo ante otro guerrero de las pistas, como el español David Ferrer.

El local no se rindió, celebró cada punto, se motivó, pero no le fue suficiente. Ferrer firmó el último día de Hewitt por 6-2, 6-4 y 6-4 y ya espera al estadunide­nse Steve Johnson, 31 del mundo, que derrotó al brasileño Thomaz Bellucci, por 6-3, 6-2 y 6-2.

El ibérico, semifinali­sta en Australia en 2011, fue demasiado para el actual 308 de la clasificac­ión mundial, y tras romper por primera vez el servicio de Hewitt en el quinto juego, encarriló el

De Copa Davis:

2 partido y se apuntó las dos mangas iniciales 6-2 y 6-4, y tuvo a su favor la tercera, pero en el sexto game, el australian­o le arrebató el saque, para firmar el 3-3 y volver a entrar en el choque.

Hewitt, apoyado por el público de Melbourne, se motivó punto a punto, pero la reacción de David no se hizo esperar y de inmediato restableci­ó su ventaja para no perderla y sellar la victoria.

El australian­o, que fue número uno mundial a los 20 años y ganó dos títulos de Grand Slam (US Open 2001 y Wimbledon 2002), nunca se rindió, pero confirmó su despedida, emocionado y vitoreado.

Lo acompañaro­n sus hijos, que bajaron junto a él a la pista, y su mujer, quien dejó escapar algunas lágrimas, como Lleyton.

“Di todo lo que tenía y es algo de lo que siempre puedo estar orgulloso en mi carrera, de dar el 110 por ciento, siempre que jugué en este estadio me sentí como en mi segunda casa y estoy muy agradecido por el tiempo que pasé aquí”, expresó.

“Es un día triste, porque Lleyton termina su carrera” comentó Ferrer al finalizar encuentro. “Es un espejo para mí, es un ídolo y un jugador impresiona­nte, disputar el último partido de Lleyton es muy especial, fue duro, él pelea hasta la última pelota, merece cualquier cosa y la noche era para él”, resaltó el español.

El héroe aussie aseguró: “Todavía no me he dado cuenta, quizá dentro de un par de días lo note, tuve un último mes increíble, jugando en todos los grandes lugares de este país”, señaló, en referencia a los torneos recientes.

El jugador nacido en Adelaida cuenta en su dilatada trayectori­a también con dos títulos de Copa Davis (1999 y 2003).

Hasta la fecha, ha sido el tenista más joven, con 20 años, en alcanzar el puesto más alto del ranking mundial, donde permaneció 80 semanas, superando a sus compatriot­as John Newcombe (8) y Patrick Rafter (1).

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David Ferrer (i) saluda a Lleyton Hewitt tras el encuentro
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El tenista australian­o se despidió de su público
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