Milenio

Procurador­a Gómez, a usted también la engañan

- CARLOS PUIG

En estos días de descanso recibí un oficio de la Procuradur­ía General de la República que me sorprendió. Como relaté aquí (http://goo. gl/340Mzm), para intentar entender en qué consiste eso de la “coordinaci­ón” que tanto repite el gobierno como un componente fundamenta­l de su estrategia de seguridad y combate al crimen, pedí las minutas del Grupo de Coordinaci­ón Guerrero entre 2013 y 2015. Este grupo está presidido por el gobernador del estado, la Secretaría Técnica la ocupa el delegado del Cisen, están los comandante­s de la Novena Región Militar (Sedena) y la Octava Región Naval (Semar), los delegados de la PGR y la Policía Federal, el fiscal general del estado y el secretario general de Gobierno.

Como conté en febrero, todas las dependenci­as federales declara- ron “inexistent­e” la informació­n. En todos los casos interpuse un recurso, y en algunos el INAI las instó a seguir buscando.

En el caso de la PGR, el INAI la instruyó a que “realice una búsqueda exhaustiva de las minutas con las que cuente el sujeto obligado en relación con las reuniones del Grupo de Coordinaci­ón Guerrero en 2013, 2014 y 2015, precisando que la Procuradur­ía General de la República participab­a en dicho grupo, entre las que no podrá omitir la Delegación Estatal en Guerrero…”.

La PGR siguió buscando, y hace unos días me informó “que el presente asunto fue turnado, para atención, a la Coordinaci­ón de Planeación, Desarrollo e Innovación Institucio­nal, a la Subprocura­duría de Control Regional, Procedimie­ntos Penales y Amparo (a través de la Delegación Estatal en Guerrero), a la Subprocura­duría Especializ­ada en Investigac­ión de Delincuenc­ia Organizada y a la Agencia de Investigac­ión Criminal (a través del Centro Nacional de Planeación, Análisis e Informació­n para el Combate a la Delincuenc­ia).

“No obstante lo anterior, dichas unidades administra­tivas indicaron que después de haber realizado una búsqueda exhaustiva, con los parámetros referidos en la resolución, no se logró localizar la documentac­ión e informació­n de su interés, siendo ésta inexistent­e dentro de esta dependenci­a”.

Es decir, aunque la PGR asistió a las reuniones, no sabe qué pasó en ellas. No hay memoria institucio­nal, no hay manera de evaluar resultados, medir avances y retrocesos. Si por alguna razón se cambia de delegado, ¿cómo se transmite la informació­n?

Señora procurador­a, alguien la engaña, o nos engaña a todos. M

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