Hackeo a Ashley Madison revela vínculo entre adulterio y estafas
Académicos de las escuelas de negocios de las universidades estatales de Tulane y Michigan utilizaron la filtración para un análisis de empresas
El hackeo que sufrió el sitio para relaciones extramaritales Ashley Madison el año pasado causó vergüenza a millones de personas.
Pero para los académicos de las escuelas de negocios de las universidades estatales de Tulane y Michigan, los datos filtrados presentaron una oportunidad de investigación: ¿cuántos clientes del sitio utilizaron las direcciones de correo electrónico de sus trabajos y qué dice esto sobre las empresas que los contrataron?
Los investigadores analizaron más allá de las empresas que tenían cuentas inactivas en Ashley Madison. Alguien los pudo registrar como broma.
En su lugar examinaron cuentas con actividad entre 2002 y 2014, con la compra de créditos para emitir mensajes, iniciar sesiones de chat o enviar regalos virtuales.
Descubrieron que 47 mil personas usaron las direcciones de correo electrónico de su trabajo en el sitio. La práctica no estaba muy generalizada. En esas empresas donde la gente utilizó la dirección de trabajo, el número de personas que lo hizo tuvo un promedio de solo 5.4.
Pero los investigadores dijeron: “Nuestra hipótesis es que estas cuentas son la punta de un iceberg... da una señal (posiblemente ruidosa) de culturas que son “laxas”. Estas son compañías, dijeron, que no hacen “énfasis en la integridad”.
En su documento “Cincuenta sombras de cultura corporativa” los investigadores observaron algunas características de las empresas donde trabajaban los temerarios. Los resultados son sorprendentes.
Las empresas donde estaban los Personas que usaron el de su empresa para crear una cuenta en Ashley Madison aspirantes a tener una relación extramarital tenían más probabilidad de recibir sanciones de la Comisión de Bolsa y Valores de EU por irregularidades contables.
Tenían un mayor historial de participar en escándalos de sobornos y fraudes, disputas fiscales, violaciones de derechos humanos y problemas de calidad de producto.
Excepto que esto no fue el único conjunto de resultados. Las empresas que emplearon personas miembros de Ashley Madison también parecían ser más inventivas y creativas. Tuvieron más éxito en las solicitudes de patentes, y esas patentes cubrían una amplia gama de tecnologías. Las empresas solían estar en los sectores de alto crecimiento.
Los investigadores sugirieron que estos dos conjuntos de resultados son perfectamente compatibles. Romper las reglas y la creatividad a menudo van de la mano.
“Los pensadores creativos pueden encontrar creativamente los vacíos legales, pero potencialmente de una manera poco ética para resolver problemas difíciles, y pueden inventar justificaciones creativas para un comportamiento deshonesto”, escribieron.
Los investigadores aceptaron que había personas creativas e inventivas que son escrupulosamente éticas. Pero su investigación no es la única que muestra la relación de la creatividad con el comportamiento deshonesto. Otros investigadores descubrieron lo mismo.
“Nuestros resultados sugieren que se tiene que elegir entre tener una cultura ética, que se mueve bajo las reglas y tiene una orientación al proceso y una cultura que alienta a la innovación y a la toma de riesgos”, escribieron.