¿ El novato del año?
Gary Sánchez llegó e impactó con Yanquis, aun así, surge la polémica de si merece llevarse el galardón
El dominicano Gary Sánchez no sabrá mucho de Willie McCovey. Pero desde ahora y hasta noviembre, el receptor de Yanquis conocerá más sobre la leyenda de Gigantes.
Tras surgir como uno de los novatos más productivos en su estadía de 50 días con Nueva York —lo cual incluye ser el más rápido en llegar a los 19 jonrones como novato (43 juegos en 2016, 45 en total)— Sánchez debería tener un jugador favorito cuando se entreguen las papeletas para el premio al Novato de la Americana al final de la temporada regular.
Ese jugador debería ser McCo- Minnesota Minnesota Baltimore Miami Cleveland Tampa Bay Houston Milwaukee NY Mets Los Ángeles San Diego vey, el inicialista con un potente bat que fue Novato del Año de la Liga Nacional en 1959 para comenzar una carrera en la que fue convocado seis veces al Juego de Estrellas, fue reconocido como MVP del Viejo Circuito en 1969 y fue elegido al Salón de la Fama en su primer año en la boleta.
McCovey estaba en Triple A esperando su oportunidad detrás del puertorriqueño Orlando Cepeda hasta julio de 1959. McCovey solo jugó en 52 partidos de MLB, pero fue elegido como Novato del Año de manera unánime.
Por eso nadie puede decir lo que muchos ha señalado en las últimas semanas: que Sánchez no puede ser uno de los candidatos para el premio porque Yanquis lo dejó en Scranton/Wilkes-Barre hasta que cambiaron al boricua Carlos Beltrán, al cubano Aroldis Chapman, al dominicano Iván Nova y a Andrew Miller.
Sánchez vio acción en algunos juegos de MLB en las últimas dos campañas, pero fue hasta el 3 de agosto que pudo ganarse el puesto de receptor titular por encima de Brian McCann. El toletero ha sido toda una sensación, bateando .337 con 19 jonrones y 38 impulsadas en 41 partidos, cuando restan 11 en la campaña regular.
Su producción ha sido similar a la de McCovey y lo ha logrado borrando las interrogantes sobre su desempeño detrás del plato.
“Ese muchacho es un bateador peligroso”, dijo el mánager de Medias Rojas, John Farrell. “Pienso que como receptor ha superado las expectativas. Es un jugador de alto nivel”.
¿Pero debería ser visto como legítimo candidato, debido a que Yanquis tardó en subirlo al equipo grande? Ese es el dilema.