A, B, C DEL ALTO RENDIMIENTO
Aplaudo la decisión de Conade de fortalecer el deporte universitario, ya que con ello seguramente se ampliarán las opciones de apoyos para los atletas, así como mejores oportunidades de desarrollo al más alto nivel, que ahora había quedado solamente en manos de los estados y las Federaciones Nacionales. A lo anterior y no menos importante, los atletas tendrán a la par una preparación profesional que les permitirá tener opciones de desarrollo más allá del deporte en el momento del retiro. Hay muchos y muy buenos ejemplos de atletas que han podido desarrollarse en el ámbito universitario, sin embargo son pocos comparado con la cantidad de Universidades que podrían mejorar su infraestructura y su personal profesional para atender a más atletas, tanto entrenadores, fisiatras, nutriólogos, psicólogos y médicos del deporte, entre otros profesionales de las ciencias aplicadas al deporte. La clave desde mi punto de vista, más allá de la inversión que se pueda hacer en infraestructura deportiva, estará en la formación y capacitación, así como ubicar los eventos multideportivos del sector universitario de acuerdo al Sistema Nacional de Competencias, en el mejor momento y espacio de acuerdo a la estrategia nacional, cuidando no duplicar esfuerzos como hasta ahora se ha venido haciendo con la Olimpiada Nacional y el Campeonato Nacional Juvenil, que apenas inició hace un año.
Bien por supuesto también a la Conade por haber logrado evitar el pago de la multa que había impuesto la Federación Internacional de Natación a México por cinco millones de dólares por cancelar el mundial de las especialidades acuáticas que se tenía ganado para Guadalajara en el 2017, más el último pago de 2.5 millones del costo inicial, así como también una multa menor por cancelar también un Panamericano Juvenil femenil de polo acuático, que se debió llevar a cabo el año pasado. Siempre he lamentado la cancelación del mundial, pues podría haber sido un detonante fundamental para elevar el nivel de los deportes acuáticos, sumando a los beneficios globales y de impacto turístico que tiene un evento de esa naturaleza, aún y cuando reconozco que el costo era muy alto, más aún cuando se esperaba que todo fuera cubierto por el Gobierno.
Con la finalización de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos, vendrá el análisis puntual y espero pronto la coordinación entre organismos, para que inicien las nuevas Olimpiadas, proceso de cuatro años para llegar a los próximos Juegos en Tokio 2020. Empecemos a sumar y seguramente tendremos más medallas, así como más atletas en finales. ¿Ustedes qué piensan?