Chivas rescata la victoria
El Rebaño se impuso por la mínima diferencia al Veracruz, rompiendo la racha de dos derrotas que tenía; Pablo Marini peligra con los Tiburones
Chivas encontró una bocanada de oxígeno en su visita al Veracruz. El triunfo por la mínima diferencia le permitió a los de Matías Almeyda romper una racha de dos descalabros y mantenerse en los puestos de Liguilla.
En cambio, el resultado complica la situación de Pablo Marini en el Veracruz, es más su destitución parece inminente, ya que el equipo no levanta y se sigue hundiendo en la tabla de posiciones y en el porcentaje.
El conjunto rojiblanco era el que tenía la posesión del esférico, y se notaba, constantemente aparecía en territorio enemigo. Tan es así que, tras una buena trangulación, Orbelín Pineda quedó de frente al marco, pero no estuvo cómodo para el remate.
Veracruz se notaba incomodo en esos minutos, cada vez que avanzaba, el enemigo apretaba para quitarle el balón, y ahí se esfumaban sus esperanzas.
Aun así, los escualos tuvieron su oportunidad. Adrián Luna burló la defensa chiva, mandó el centro, y cuando parecía que el esférico se podía colar a la portería, Jesús Sánchez lo sacó.
De inmediato, los visitante respondieron, pero aunque Pineda quedó de frente al marco, no le pegó bien y Melitón Hernández cortó la ilusión de los aficionados del cuadro tapatío.
Sin duda, Pineda era el que mayores dolores de cabeza le daba a los locales, llegaba, filtraba, disparaba a gol, pero hasta esos instantes no surtía efecto.
De las mejores que tuvo el Guadalajara en el primero tiempo fue un tiro libre de Edwin Hernández, la pelota pegó en el palo, y en el contrarremate, el mismo Hernández disparó, pero no logró el tan ansiado tanto.
Veracruz soltó las riendas que empezaba a tomar. Los pupilos de Matías Almeyda eran superiores y peligrosos. Así lo demostró también Isaac Brizuela, quien recortó bien, pero su tiro lo detiene Melitón, quien en esos lapsos era el mejor de su equipo, gracias a él se mantenía en cero en los cartones.
El portero le respondía a su entrenador, quien sentó a Pedro Gallese desde el duelo de media semana contra Puebla. Y es que, el arquero peruano tuvo varios errores que no le agradaron al timonel Pablo Marini y de ahí la determinación.
El partido bajó en intensidad, pero sin duda, el que mejor se veía era el Guadalajara, Veracruz no aparecía por más que intentaba hacerse de la redonda. Así se esfumaban los minutos, y el duelo no encontraba acción.
Quien de plano no aparecía era Alan Pulido, se notaba bastante precipitado, tratando de tomar el balón desde atrás, pero sin éxito. No hubo más en la primera mitad, Chivas no logró aprovechar la superioridad que tuvo en los primeros minutos.
Para la segunda parte, de nueva cuenta Melitón detuvo cuanto balón le llegó. Chivas necesitaba más potencia a la hora de pararse frente al marco rival, algo que pudiera hacerle daño a Hernández y a su defensa.
La más clara de los escualos fue una pelota que manda Luna a Juan Ángel Albín, quien le gana la carrera a Michael Pérez, y ante la salida del portero Cota, la punteó, pero no llegó al lugar deseado.
Ante la falta de creatividad, Almeyda mandó al terreno de juego a Javier Chofis López, quien tenía la encomienda de conectarse con Pulido. Esa modificación hizo que Cisneros fuera retrasado como lateral. Luego ingresó Néstor Calderón, quien logró destrabar el juego.
Al minuto 77 vino un centro al área y ahí apareció Calderón para conectar un cabezazo y sentenciar el juego.
Una victoria balsámica para Chivas que no se va con las manos vacías esta semana; en cambio, la derrota huele a condena para Pablo Marini y su proyecto con el Veracruz.