Niza, corazón de la Costa Azul
EL MEDITERRÁNEO FRANCÉS TIENE UN PUERTO QUE DESDE HACE SIGLOS, FUE CENTRO DE DESCANSO PARA LA ARISTOCRACIA EUROPEA. HOY DÍA ES UNO DE LOS SITIOS MÁS COSMOPOLITAS DE EUROPA
Los griegos llegaron al Mediterráneo en búsqueda de comercio, llevando y trayendo productos, ampliando horizontes y generando un intercambio cultural que volvió desde el comienzo, al entonces puerto de Niquea en un lugar donde convergen diferentes culturas.
Llamado Niza más adelante, este lugar al sur de Francia estuvo en disputa por diversos imperios y reinos: Roma, Saboya, Cerdeña, Piamonte, así como por Italia y finalmente Francia, quien conserva su posesión hasta el presente.
Hasta estas costas llegaron las familias reales de Gran Bretaña y Rusia a lo largo del siglo XIX, pasaban largos períodos de descanso convirtiendo a Niza en un lugar que los europeos de distintos reinos y países querían visitar por todo lo que se escuchaba de los grandes palacios, fiestas y excentricidades.
En la actualidad Niza sigue conservando en sus calles ese pasado aristócrata con grandes y lujosos edificios, playas que cuentan historias de reinas y zares, así como vestigios de esas rancias monarquías en sus alrededores, desde Mónaco hasta Cannes.
¿CÓMO LLEGAR A NIZA?
El aeropuerto más importante en la costa mediterránea francesa está aquí, de hecho los viajeros cuyo destino final es Montecarlo en Mónaco, San Remo en Italia o Cannes en la misma República Francesa pasan por esta terminal aérea.
Desde la Ciudad de México Air France ofrece vía París, llegar en menos de 16 horas hasta el corazón de la costa azul francesa con los cuatro tipos de cabina que tiene disponibles. También desde París se puede llegar en tren de alta velocidad, solo tres horas y veinte minutos de recorrido.
Para los más aventureros también es posible llegar en automóvil desde cualquier punto de Europa, las carreteras son de primera categoría —como en el resto de la Unión Europea— y la señalización es homogénea, por lo que no hay lugar para confusiones.
¿QUÉ HACER EN NIZA?
Además de las playas cristalinas del Mediterráneo francés, las vistas espectaculares de los acantilados y las calles, este puerto tiene actividades muy diferentes del resto de Francia, desde escuchar una ópera o un concierto sinfónico en la Ópera de Niza, hasta ver una obra teatral ecléctica y contemporánea en el teatro Francis Gag. También el Museo de Arte Contemporáneo es un lugar digno de explorarse, todos ellos muy cerca del centro de la ciudad. El mercado de las flores es uno de los lugares más interesantes para los viajeros, a un costado del ascensor que nos lleva hasta la punta del castillo que existió en Niza y, hoy es un parque público con una vista espectacular del puerto y la ciudad. Las playas son un atractivo de clase mundial, sobre todo, en el verano las cálidas aguas del Mediterráneo bañan esta costa tapizada con pequeñas piedras a diferencia de las arenas blancas que solemos ver en el Caribe, por ejemplo. Al norte de la ciudad, está el barrio de la Liberación, en sus calles hay mercados, cafés, restaurantes y todo tipo de negocios locales, que permiten ver esa otra cara de la ciudad, fuera del lujo y las excentricidades, muy cerca de la realidad del sur de Francia y lo espectacular de sus productos locales.
LOS ALREDEDORES
Muy cerca de Niza están Cannes, Montecarlo (Mónaco) y San Remo (Italia), vale la pena visitar estas tres ciudades circunvecinas, sin embargo Niza tiene un gran número de posibilidades turísticas, cinco o seis días no serán suficiente para descubrir sus rincones y su hospitalidad, además de una gastronomía excepcional. M