ESCALA INCÓMODA
LA SELECCIÓN MEXICANA DE FUTBOL LLEGÓ ANOCHE A PUERTO ESPAÑA; PESE A SU GRAN PASO EN LA ELIMINATORIA ARRIBA A UN TERRITORIO INCONQUISTABLE DESDE EL 2004 Y A UN ESTADIO IMPRESENTABLE
Sin hablar y con gritos de euforia de un pequeño grupo de mexicanos, llegó la selección mexicana de futbol a Puerto España, donde jugará mañana ante Trinidad y Tobago la fecha cuatro del Hexagonal final para el Mundial de Rusia 2018. La mañana del domingo, el Tricolor trabajó en el Centro de Alto Rendimiento, donde comió, de ahí la delegación se trasladó al aeropuerto capitalino de donde partió a las 15:30 horas en vuelo charter a Puerto España, ahí llegó a las 23:30 horas locales.
Este lunes por la tarde, a las 17 horas, pisará la cancha del estadio Hasely Crawford, ahí Osorio definará el once que jugará, luego de la práctica ligera en la que se apuntarán detalles de cara el crucial encuentro.
En tanto, el calor y la humedad no solo serán los problemas que podría toparse la selección mexicana de futbol, hay uno mayor y es el mismísimo Hasely Crawford.
El estadio más grande de Trinidad y Tobagol, y la casa oficial de los soccer warriors, presenta unas condiciones deplorables y no apta para un equipo profesional de futbol, mucho menos para albergar un juego de eliminatoria mundialista.
El césped tiene hoyos que podrían causar lesiones en los jugadores y aunque la tribuna es lejana a la cancha por la pista olímpica, invadirla podría ser sencillo para cualquier aficionado.
Lo peor del Hasely Crawford, sede de varios encuentros de la Copa Mundial Sub 17 del 2001, son sus vestidores, lockers sin seguridad, golpeados y oxidados le esperan al Tricolor, solo cuatro bancas frente a un pizarrón tratarán de ofrecerle comodidades, pero eso no es lo peor, sino los seis espacios únicos en la zona de las regaderas, así como tres sanitarios para todo un equipo de futbol. En Puerto España no le aguarda ninguna comodidad a la selección mexicana de futbol, a cargo de Osorio.