Con alianza, INCJ ofertará por el negocio de chips de Toshiba
El pacto es el último esfuerzo por competir contra Broadcom, el fabricante de circuitos integrados estadunidense, y Foxconn, proveedor de Apple
Un fondo con respaldo del gobierno japonés está cerca de recopilar una oferta de 2 billones de yenes (alrededor de 18 mil millones de dólares) por la codiciada operación de chips de memoria de Toshiba al unirse a un consorcio que incluye a Bain Capital, el grupo estadunidense de capital privado, y a SK Hynix de Corea del Sur, de acuerdo con personas que participan en las negociaciones.
El último esfuerzo que hace el fondo Innovation Network Corporation of Japan (INCJ) para armar una oferta que pueda competir contra Broadcom, el fabricante estadunidense de chips, y Foxconn, el proveedor de Apple, se produce cuando el plan inicial del gobierno para asociarse con Western Digital está en peligro por una creciente disputa legal entre Toshiba y su socio norteamericano en la producción de chips.
INCJ es el primer fondo de inversión con respaldo del gobierno de Japón, se creó en 2009 con 18 mil millones de dólares (mdd).
La propuesta de INCJ, que todavía se tiene que finalizar, se espera que incluya capital de Bain, el Banco de Desarrollo de Japón y un grupo de empresas japonesas no identificadas.
Las dos personas familiarizadas con el paquete de INCJ dijeron que SK Hynix no tomaría una participación directa en la operación de chips de Toshiba, para que de esta manera se puedan evitar problemas antimonopolio. Bain no estuvo disponible inmediatamente para hacer comentarios. INCJ, el Banco de Desarrollo de Japón y SK Hynix, que anteriormente confirmó su oferta por la operación de chips de Toshiba en una presentación regulatoria, no quisieron
Innovation Network Corporation of Japan fue formado en 2009, con un capital de 18 mil mdd
proporcionar ninguna postura.
Toshiba, el grupo industrial japonés en problemas, necesita vender su emblemático activo para recuperarse de la crisis financiera que se produjo como resultado de los enormes excesos de costos en los proyectos de energía nuclear en EU que lo obligaron a poner a su filial Westinghouse bajo la protección del Capítulo 11 de bancarrota.
Pero la subasta se convirtió en una batalla de ofertas compleja y politizada, y los funcionarios del gobierno expresaron su preocupación de que el control del último fabricante de chips japonés competitivo a escala mundial caiga en las manos de un rival extranjero.
La segunda ronda de ofertas cerró el mes pasado. Broadcom, que se asoció con Silver Lake, la firma de capital privado, y Foxconn de Taiwán, y que organiza una oferta conjunta con Apple y otros grupos estadunidenses de tecnología, surgieron como los principales postores.
La propuesta original de Bain habría sido parecida a una compra tradicional de administración que dejaría tanto a la dirección actual de la filial de chips en su lugar, y a la matriz del Toshiba con lo que las personas con información dijeron que sería una participación “significativa” de acciones.
Mientras tanto, el Ministerio de Economía, Comercio e Industria de Japón inicialmente esperaba poder armar un consorcio liderado por INCJ que incluyera capital de Western Digital, el socio de Toshiba en una empresa conjunta, y el grupo de capital privado KKR. Las posibilidades de esa oferta se oscurecieron después de que el grupo estadunidense trató de bloquear la venta sobre la base de que un acuerdo sin su consentimiento violaría los términos de su empresa conjunta.
El miércoles, Western Digital, con sede en Silicon Valley, dijo que su filial SanDisk solicitó a un tribunal de California una orden para impedir que Toshiba transfiera sus intereses en la empresa conjunta al conglomerado central japonés en preparación para la venta. teme que la empresa caiga en manos de un rival extranjero
Toshiba dijo que todavía no recibe la reclamación y reiteró que tiene planes de elegir al licitante preferente para la segunda mitad de este mes y buscará cerrar un acuerdo para el 28 de junio.
Los ejecutivos de la compañía se reunieron el jueves para discutir las ofertas en competencia, pero es poco probable que hayan elegido a un licitador preferente, dijo una persona cercana a Toshiba.
Además de la disputa legal, personas cercanas a las negociaciones dijeron que los esfuerzos de INCJ para compilar la oferta con Western Digital se complicaron por la dificultad que tiene el grupo estadunidense para recaudar el capital para poder competir contra Broadcom y Foxconn, que presentaron ofertas superiores a 2 billones de yenes.
Para disipar el enfrentamiento, Western Digital renunció a su petición anterior de tomar una participación mayoritaria en el negocio de chips y prometió proteger los puestos de trabajo. Pero los nuevos malabares de los participantes puede continuar, y Western Digital todavía busca unirse a la oferta de INCJ, de acuerdo con personas cercanas a la empresa estadunidense.
Western Digital opera en conjunto con Toshiba una planta de fabricación de flash NAND en Japón, y cualquier interrupción en los suministros de chips puede ser un duro golpe para el negocio general del grupo de EU.
Pero la compañía expresó su oposición a que Toshiba venda su división de chips a Broadcom, y una alianza con su rival SK Hynix, también puede resultar ser algo complicada.