TOMARÁ POSESIÓN EL 5 DE FEBRERO DE 2018 Rescatar la Arquidiócesis, reto del cardenal Aguiar Retes
“Es leal al papa Francisco y buscará implementar las reformas pontificias sin temor a enfrentarse a un Episcopado tan reacio”, opina Mónica Uribe
Especialistas en religión coincidieron en que entre los retos que enfrentará el cardenal Carlos Aguiar Retes a su llegada a la Arquidiócesis de México están “reconstruirla” y “abatir el burocratismo clerical”, así como atraer a más católicos, debido a que, de acuerdo con datos del Inegi, en 20 años han abandonado la Iglesia y es la ciudad en la que se registra el mayor decrecimiento de fieles, al pasar de 92.4 por ciento en 1990 a 82.6 por ciento en 2010.
El papa Francisco hizo efectiva la renuncia del cardenal Norberto Rivera Carrera el miércoles pasado y designó como arzobispo primado de México al cardenal Carlos Aguiar Retes, actual arzobispo de Tlalnepantla, quien tomará posesión del cargo a partir del 5 de febrero de 2018, a las 12:30 horas, en una ceremonia que se celebrará en la Basílica de Guadalupe. Mónica Uribe, especialista en religión, consideró que la designación del cardenal Aguiar Retes en la Arquidiócesis Primada “tiene un mensaje político en tándem del secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, y del papa Francisco. La Iglesia, de cara a la coyuntura electoral, apoyará a la ciudadanía en lo que elija, pero no se dejará seducir ni por la derecha, ni por los populismos, ni por el gobierno”.
En ese sentido, opinó la especialista, “se reitera la independencia de la Iglesia frente a la cuestión política, porque la CdMx es un bastión de la izquierda —PRD y Morena—, mientras que Aguiar le tira más bien a la derecha, pero no tan conservadora. Con el populismo no puede, ni le interesa”.
Uribe también señaló en entrevista que con esta designación “no se la jugaron. En función de un escenario político que perciben convulso, la opción lógica era enviar a la sede primada a un prelado que ya es cardenal, cuenta con todas las credenciales y, muy especialmente, conoce el sistema político y sabe cómo conducirse en ese terreno”, agregó.
Sobre el perfil del nuevo arzobispo, dijo que “es leal al papa Francisco y buscará implementar las reformas pontificias, sin temor a enfrentarse a un Episcopado tan reacio a reconocer y echar a andar una pastoral más humana, moderna y sensible, según el modelo de Bergoglio”.
Al respecto, el experto en religiones Bernardo Barranco expuso que “Aguiar llega como un amigo del papa; la lectura que se da es que Francisco enfrenta severas rebeliones de grupos conservadores, de los cuales Norberto Rivera formaba parte... ante estas rebeliones, el acento está en la lealtad a sus reformas y proyecto... pero no es un pastor progresista”.
Barranco coincidió en que el punto nodal son las elecciones de 2018, ya que Rivera Carrera presionó en la clase política sobre temas torales de la Iglesia, como el aborto, con planteamientos duros; sin embargo, Aguiar Retes es más dialogante y sabe cabildear.
La asociación Católicas por el Derecho a Decidir consideró que el nombramiento representa una nueva oportunidad para que la Arquidiócesis de México promueva un catolicismo más cercano a su feligresía.
Entre los retos para Aguiar Retes, Bernardo Barranco consideró “reconstruir una arquidiócesis que está hecha pedazos, hay una caída estrepitosa de los católicos en Ciudad de México, doble de la caída nacional, y una Iglesia muy burocratizada y centralizada. Aguiar Retes necesita construir un nuevo relato de qué significa ser pastor en la capital”. Ante el nombramiento hecho por el papa, el cardenal Norberto Rivera difundió un mensaje de agradecimiento y despedida en una carta en la que asegura: “Me llevo la satisfacción de no haber permanecido mudo ante la violación de los derechos humanos y divinos de mi madre, la Iglesia”.
También pidió disculpas al señalar: “Lamento si, por mi posición firme, alguien se sintió ofendido y lastimado, y una vez más pido humildemente perdón a quien, aun sin querer, haya ofendido”.
Posteriormente, la Arquidiócesis agradeció al cardenal Norberto Rivera Carrera los más de 22 años que como pastor guió y cuidó de esta Iglesia, al señalar en su sitio oficial que “son muchos los frutos de este largo episcopado por los que le quedamos agradecidos, pero también queremos darle las gracias por la entrega de su vida, por su amor a la Arquidiócesis de México, por su fe firme y por su valor para defender la verdad”. M