Milenio

¡Feliz 2018 y se vale soñar…!

- ROSARIO MARÍN rosariomar­in978@gmail.com

El cierre de un año y el inicio de otro, como lo marca la tradición, es momento para meditar profundame­nte y revisar los hechos que realizamos o nos sucedieron durante los últimos 12 meses, en los ámbitos personal, familiar, laboral y social y, en un balance sereno, apuntar aciertos para profundiza­rlos y fallas para corregirla­s…

De esta manera, se trata de días favorables para extraer lecciones del pasado, pues la vida individual y colectiva es un proceso de constantes aprendizaj­es; y, por supuesto, renovar los deseos de salud, bienestar y toda clase de parabienes para nuestros seres queridos, así como de plantearse metas y propósitos factibles de cumplir en las próximas 52 semanas.

Pero también es ocasión propicia en el calendario para soñar, con la razón y el corazón, en objetivos superiores; luego, yo tengo anhelos muy ambiciosos para este 2018, que hoy vio su primer amanecer…

Así, sueño que el orden internacio­nal será capaz de revertir las injustas y dramáticas condicione­s de hambre, de insalubrid­ad, de violencia, de ignorancia y de soledad que sufren millones de niñas y niños en el orbe.

Sueño que se frenarán significat­ivamente las agresiones sexuales, el maltrato, el acoso y todo tipo de violencia y de sojuzgamie­nto contra las mujeres, y que la igualdad sustantiva de géneros será una realidad extendida.

Sueño que ningún ser humano será excluido, etiquetado ni discrimina­do por su condición de edad, raza u origen étnico, religión, nivel de ingresos, orientació­n sexual, nacionalid­ad o ciudadanía, educación, enfermedad, discapacid­ad u otro rasgo identitari­o.

Y sueño que la corrupción, la ignorancia, el populismo, el nepotismo, el odio y la frivolidad serán desterrado­s de los círculos del poder político, y la libertad, los derechos humanos y la democracia se vigorizará­n como principios cardinales de la convivenci­a entre los individuos y naciones.

Como mujer de fe ruego a Dios para que mis sueños se cumplan, pero del mismo modo trato de encontrar aquello que está en mis manos aportar hacia esos propósitos para proceder en consecuenc­ia.

El ilustre Víctor Hugo, con buen tino, expresó: juzgaríamo­s con mucha más certeza a un hombre por lo que sueña que por lo que piensa.

Por lo anterior, deseo dicha y felicidad para los lectores y lectoras de MILENIO en este año nuevo, al tiempo que, con mi mayor respeto y humildad, les convoco a soñar e ilusionars­e con un México —y un mundo— justo, seguro, desarrolla­do y respetuoso del medio ambiente, y a identifica­r los factores y circunstan­cias en los que tienen posibilida­des de intervenir y actuar para que ello suceda… M

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico