Cleveland cerró 0-16
Los Browns desperdiciaron su última oportunidad de ganar en 2017 y terminaron la campaña sin victorias
Los Browns de Cleveland se unieron a los Leones de Detroit de 2008 como los únicos equipos en la historia de la NFL en terminar la temporada regular con marca de 0-16, al no encontrar la forma de superar a los suplentes de los Acereros de Pittsburgh, que se impusieron por 28-24.
Los de Ohio tenían una última oportunidad al final del cuarto periodo, pero el pase del quarterback DeShone Kizer para Corey Coleman se le cayó de las manos al receptor y fue incompleto, para terminar con la serie. Tras ello, por ocasión 16 en 2017, los Browns salieron del campo en busca de respuestas que parecen no llegar para la franquicia desde que regresó a la NFL hace dos décadas.
El entrenador Hue Jackson espera regresar la próxima temporada, a pesar de una marca de 1-31 en los últimos dos años y con dos de las primeras cuatro selecciones del Draft colegial de abril.
Kizer terminó con 314 yardas por aire y dos touchdowns para Rashard Higgins, pero también lanzó una intercepción en el cuarto capítulo, su 22 de la campaña.
Los campeones del Norte de la Americana, los Acereros (13-3) dejaron en la banca a sus estrellas Ben Roethlisberger y Le’Veon Bell, entre otros, pero no importó. Landry Jones completó 23 de 27 pases para 239 yardas con una anotación y una entrega y el receptor novato JuJu Smith Schuster atrapó nueve veces el balón para 143 y un touchdown, además de regresar el ovoide 96 yardas hasta las diagonales.
La defensiva de los de negro y amarillo capturó a Kizer en seis ocasiones, para un total de 56 en la temporada, una marca de la franquicia.
Casi cuatro meses después de una dolorosa derrota por 21-18 ante Pittsburgh para abrir la campaña que parecía indicar situaciones positivas para Cleveland en el resto del 2017, los Browns saltaron al campo en el Heinz Field en búsqueda de su primer triunfo en 372 días.
La espera se prolongará al menos ocho meses más, después de un encuentro de tres horas que fue el símbolo perfecto de una temporada para el olvido.
Aunque hubo signos de esperanza, incluidos un par de robos de balón de la defensiva y conexiones de Kizer con Higgins y Josh Gordon, los Browns no encuentran la forma de ganar.
Dos veces en la primera mitad concedieron castigos en tercera oportunidad a la defensiva que permitieron alargar las series de Pittsburgh; en tres ocasiones en el último cuarto, Cleveland tuvo el ovoide para ponerse arriba en el marcador.
Las primeras dos terminaron con entregas, para sumar 41 y encabezar la Liga, y la tercera fue la escapada de Kizer en cuarta oportunidad en la yarda 27 de territorio rival, que se cerró con el balón escapándosele a Coleman.
Pittsburgh aseguró descansar en la primera ronda de los playoffs y recibir el juego de la ronda divisional.