Prevé Deutsche impacto por reforma fiscal de EU
El mayor banco alemán advierte que registrará su tercera pérdida anual consecutiva debido al choque de mil 500 mde
Deutsche Bank advirtió que en 2017 registrará su tercera pérdida anual consecutiva debido al golpe de mil 500 millones de euros como resultado de las reformas fiscales de Estados Unidos y a la caída de 22 por ciento en los ingresos comerciales y de financiamiento en el cuarto trimestre.
El banco más grande de Alemania, que esperaba regresar a las utilidades para el año completo después de pérdidas antes de impuestos de casi 7 mil millones de euros en total en los dos años anteriores, dijo el viernes que en su lugar tendrá una “pequeña pérdida después de impuestos para el año completo” en 2017.
La advertencia, que eliminó 4 por ciento del valor de las acciones de Deutsche en las operaciones posteriores, se produjo horas después de que Morgan Stanley se unió a un coro de empresas que ofrecieron detalles de los golpes de única ocasión que reciben por las reformas fiscales de EU.
Morgan Stanley dijo que sus ganancias del cuarto trimestre se van a debilitar por el cargo de mil 250 millones de dólares, en gran parte debido a que los activos de impuestos diferidos (AID), que pueden compensarse frente a las futuras cargas fiscales, tendrán un menor valor debido a los cambios profundos en el código fiscal de EU que Donald Trump convirtió en ley pocos días antes de Navidad.
Deutsche dijo que el cambio del valor de sus AID fue la razón principal por la que tendrá una pérdida para 2017, en lugar de una utilidad de mil 300 millones de euros después de impuestos que esperaban los analistas a los que consultó el banco el 3 de enero.
En un comunicado al mercado de valores, el banco señaló que el ingreso antes de impuestos, que excluye el impacto de los cambios fiscales, sería “positivo” para todo el año, pero dijo que tendrá una pérdida antes de impuestos para el cuarto trimestre.
Los ingresos por las operaciones y el financiamiento cayeron 22 por ciento en el cuarto trimestre, dijo Deustche, debido a la “baja volatilidad en los mercados financieros y los bajos niveles de actividad de clientes en negocios clave”.
Los resultados del cuarto trimestre también se verán agobiados por los costos de litigios y de reestructuración, con Deutsche ubicó en alrededor de 500 millones de euros, y una pérdida en la venta de la operación privada y comercial en Polonia del banco.
Deutsche anunciará los resultados para todo el año el 2 de febrero y esperaba tener una utilidad para mostrar el éxito de su plan de reestructuración a cinco años que anunció en 2015 y en el que prometió hacerlo menos arriesgado y más eficiente.
Por su parte, Morgan Stanley dijo en una presentación que las reformas fiscales llevarán a un cargo bruto de alrededor de mil 400 millones de dólares para el periodo, principalmente debido a que se tuvo que volver a calcular los activos de impuestos diferidos. El golpe neto será de alrededor de mil 250 millones de dólares, dijo el banco.
Pero al igual que muchas grandes empresas más de Estados Unidos, Morgan Stanley está contento de cambiar un golpe a corto plazo con una ganancia mucho mayor en el largo plazo.
El cambio permanente de una tasa impositiva efectiva en la parte baja de los 30 a uno en la parte de los 20 puede agregar cientos de puntos base a los rendimientos sobre el capital. Eso permitirá mayores pagos a los accionistas mientras que al mismo tiempo se eleva el sueldo a los empleados de alto nivel, muchos de los cuales tienen paquetes que se relacionan con el rendimiento sobre el capital.
Varios bancos ya anunciaron incrementos al salario mínimo, bonos de única ocasión y contribuciones de caridad como resultado de los cambios. Analistas de Credit Suisse agregaron un promedio de 8 por ciento en sus estimaciones de ganancias por acción para los grandes bancos de EU en 2018.
La revelación del viernes de Morgan Stanley está en línea con la Goldman Sachs, Bank of America y Citigroup, que presentaron sus AID fue la principal razón por la que tendrá una merma para 2017 rendimiento de mil 300 millones de euros antes de cambiar su estimación estimaciones brutas sobre el efecto que tendrán los cambios tributarios.
Antes de Navidad, Bank of America dijo que recibirá un golpe de 3 mil millones de dólares, “principalmente” por el menor valor de los activos de impuestos diferidos.
Citigroup dijo que esperaba un golpe de alrededor de 20 mil millones de dólares, de esto, 16 mil millones de amortización de DTA y el resto por los efectos de “repatriación”. Goldman dijo la semana pasada que esperaba asumir un cargo de alrededor de 5 mil millones de dólares durante el periodo, de los cuales, alrededor de dos tercios estarían relacionados con la repatriación.
Las antiguas reglas le permitían a las empresas diferir sus impuestos de EU hasta que llevaran al país las ganancias que tenían en el exterior, lo que en la práctica significaba que muchas multinacionales simplemente dejaban sus utilidades en las filiales donde se generaban.
La nueva ley introduce una “repatriación estimada” en la que el Tesoro gravará esas ganancias con una tasa de 15.5 por ciento si la empresa lo tiene en efectivo o en valores líquidos, mientras que las tenencias que no son en efectivo en forma de plantas y equipo enfrentarán una tasa de impuestos de 8 por ciento. El dinero se puede regresar a Estados Unidos sin penalizaciones adicionales.
La temporada de presentación de resultados del primer trimestre para los grandes bancos estadunidenses comienza el 12 de enero con JPMorgan Chase y Wells Fargo.
Con todo, esto será un conjunto de resultados “particularmente desordenado” para los bancos de Estados Unidos, dijo el analista de Bernstein, John McDonald, con varios cargos de única ocasión y ganancias relacionadas con las reformas fiscales y bancos que buscan acelerar varias deducciones en 2017. “Todo el trabajo se centrará en las guías a futuro de los bancos para las nuevas tasas de impuestos y cómo compartirán o gastarán el aumento”, dijo.