Emmanuel Besnier; el misterio del Emperador del queso
Tomó las riendas de Lactalis hace casi 18 años y se ha mantenido alejado de las cámaras
El trono del imperio lácteo tiene un amo y señor que muy pocos conocen en persona, llamado Emmanuel Besnier, un francés de 49 años de edad que desde hace casi un par de décadas tomó las riendas del conglomerado Lactalis para encargarse de conquistar el mundo, pero siempre desde las sombras.
El Emperador del queso, como es conocido en el sector empresarial, rompió hace unos días una racha de 18 años sin hablar con la prensa. El motivo del fin de su silencio fue tratar de apaciguar un escándalo que ha puesto en shock a su compañía; se le acusa de que su leche en polvo ha infectado con salmonela a decenas de bebés en Francia y en otros países.
Con esto, la frase “vivamos felices, vivamos en la clandestinidad”, que por generaciones ha sido el lema del clan Besnier, ha sido afectada. Roma no se construyó en un día, reza el antiguo refrán que hace alusión al trabajo que se necesitó para dar forma al más grande imperio que haya visto la humanidad. De igual forma, Lactalis no nació grande, sino que lo hizo como un pequeño negocio de recolección de leche en el lejano 1933.
El encargado de poner la primera piedra fue el francés André Besnier, quien con un solo empleado que le ayudaba a traer leche, fundó Grupo Besnier, una pequeña empresa que elaboraba empanadas para venderlas en su localidad.
En 1955 murió, dejándole a su hijo Michel una compañía con 50 trabajadores.
Con los cimientos bien plantados gracias a su padre, Michel estaba decidido a dar el siguiente movimiento, conquistar Francia y dar el salto a otros países. Lo primero que hizo fue cambiar el nombre de la firma a Lactalis, reforzando su