Fronteras
“Las pruebas son ahora indiscutibles y de dominio público”, afirmó el asesor de Seguridad Nacional
acusaciones según las cuales Moscú interfirió en las comicios presidenciales de 2016. “Hasta que no veamos hechos, todo lo demás es parloteo”, declaró Lavrov durante la conferencia sobre celebrada en Múnich. El ministro ruso se negó a valorar las inculpaciones en sí mismas, pero estimó que las declaraciones de las autoridades estadunidenses son contradictorias.
McMaster subrayó además, dirigiéndose al gobierno ruso, que su intento de polarizar a las sociedades occidentales promoviendo a grupos extremistas tanto en la derecha como en la izquierda “no funciona”. “Rusia debería revaluar qué trama porque simplemente no funciona”, afirmó, presentado como prueba que el Partido Republicano y el Partido Demócrata están excepcionalmente unidos a la hora de imponer sanciones a Rusia.
A su juicio, las evidencias de la implicación rusa son ahora “públicas” e “incontrovertibles”, gracias a los avances técnicos, que han permitido atribuir las actividades en internet y trazar los ataques hacia atrás hasta llegar a su origen.
Las declaraciones de McMaster son hasta ahora las más claras de la Casa Blanca al respecto.
El presidente Trump había desestimado la posibilidad de una injerencia rusa a su favor en las elecciones, además de afirmar que se trataba de un “invento”. m