EL FRANCÉS MANTUVO SU VENTAJA PARA GANAR POR CUARTA VEZ EL RALLY MÉXICO
El francés obtuvo la victoria en México demostrando la calidad que lo ha llevado a celebrar cinco títulos en fila
El francés Sébastien Ogier (M-Sport Ford) vuelve a reinar en México. El piloto galo, campeón en las últimas cinco temporadas del Campeonato Mundial de Rallies (WRC), se impuso en Guanajuato, tres años después de hacerlo por última vez.
El galo, que estuvo a la sombra del regreso de su compatriota Sébastien Loeb, aprovechó la ponchadura que sufrió el Citroën del veterano el sábado, para completar una jornada de ensueño y tomar el liderato, que ya no soltó hasta llegar al cierre de la cuarta jornada en Las Minas, para provocar el festejo con sombrero de charro, lejos de la sombra de su compatriota.
Ogier, tercero en la etapa inicial el jueves, cayó al quinto lugar el viernes, a 30 segundos del liderato, pero ganó cuatro etapas el sábado que se sumaron al incidente de Loeb para provocar que se quedara con un triunfo sin complicaciones en Guanajuato.
“Intenté sumar buenas etapas, pero no pensaba en ganar, porque sabía que en ese momento (viernes) era complicado. Cuando tienes a algunos adelante es difícil compensar, pensaba ‘debo ser fuerte y terminar en el podio’, pero a partir del siguiente día mejoré. Estoy contento, dimos unos pasos hacia adelante respecto al año pasado y al menos aquí tuvimos una gran actuación”, resumió el francés.
Ogier triunfó en México entre 2013 y 2015, después del dominio de Loeb, pero en los últimos dos años las victorias correspondieron al finlandés Jari-Matti Latvala y al británico Kris Meeke.
Precisamente el de Irlanda del Norte fue el protagonista en la primera etapa de la última jornada, cuando perdió el control del auto en Alfaro y tuvo que recibir la ayuda de los aficionados para retomar el camino, aunque con el tiempo perdido entregó el segundo lugar de la general, que recayó en el español Dani Sordo (a 1:03 minutos de Ogier, sancionado con 10 segundos).
“Tenía buenas sensaciones, no esperaba eso, pero qué puedo decir, le agradezco a los aficionados que me pusieron de vuelta. Cometimos muchos errores este fin de semana, tenía todo en las manos para pelear por la victoria: el auto, el ritmo y no lo conseguí, estoy algo frustrado, pero podemos aprender”, dijo el británico.
Para Sordo fue el cierre ideal para un fin de semana exitoso. El de Hyundai no corrió en la fecha anterior del WRC, en Suecia, pero volvió en su mejor forma en Guanajuato, donde fue líder el viernes, antes de la aparición de Loeb.
“Estoy contento, podía estar un poco más si hubiera ganado una posición, pero también estaría peor si estuviéramos más atrás. Un segundo lugar en el Rally es positivo, tuvimos una ponchadura (el sábado) que nos quitó las opciones por la victoria”, afirmó el ibérico.
REGRESO ESPECTACULAR
Otro de los protagonistas en Guanajuato fue Loeb, quien después de no correr en el campeonato por tres años, terminó en la quinta posición, detrás del noruego Andreas Mikkelsen (Hyundai), al llevarse tres etapas y demostrar a los 44 años, que su talento es a prueba de tiempo.
“Me sentí muy bien en el auto, fue bueno manejar estos nuevos coches del WRC más rápidos. Me tuve que adaptar un poco pero lo hice rápido, así que fue divertido pelear por el liderato, aunque luego frustrante detenerme por la ponchadura”, reconoció.
La última jornada sirvió para la redención de Latvala (Toyota) y el estonio Ott Tänak (Toyota), quienes sufrieron todo el Rally, pero se llevaron las dos primeras etapas aunque sin poner en riesgo la victoria de Ogier, que se había impuesto también en el inicio del calendario en Montecarlo.
El cierre fue de nuevo en Minas, en una power stage para la que todos los pilotos guardaron llantas y en la que se impuso Tänak.
El festejo en El Pípila por los 15 años del Rally México fue para Ogier, el más constante y quien aprovechó la pinchadura de Loeb y demostró que a pesar del regreso del máximo ganador en la historia, el WRC le pertenece.
Además fue en el marco del décimo aniversario desde su primer Rally, precisamente en México, cuando triunfó en la categoría juvenil y fue octavo en la general, que ganó Loeb.
“Es una gran forma de celebrar 10 años en el WRC, empecé en 2008 con una victoria aquí y este fin de semana tuve una buena actuación, lo di todo. El triunfo es bueno, pero la actuación es mucho mejor”, concluyó.