“Merecíamos ganar”: Costa
Nos vamos con una sensación un poco rara porque teníamos el partido en nuestra mano y lo dejamos ir”
en un tiro del que nunca intuyó tal recompensa. El portugués por pura inercia al recibir el pase le pegó, De Gea no pudo con él y le regaló la ventaja a su rival.
Fue un duro golpe para España, que caminó al vestuario de nuevo incrédulo ante un gol inimaginable en un guardameta de tal nivel. Sabía que debería salir de nuevo ante otra competición contra sí mismo, consciente de que el marcador era adverso por dos situaciones más que evitables, por sus errores, por dos regalos, no por los aciertos rivales ni de Cristiano, por otra parte un líder evidente que necesita Portugal en cada segundo.
También era otra prueba de fortaleza mental para España, de la que resurgió de nuevo, primero con el 2-2, otra vez de Diego Costa, atento para rematar a la red un toque con la cabeza de Sergio Busquets en una acción a balón parado botada por David Silva, y después, sin apenas pausa, con el 2-3, un golazo imparable de volea de Nacho.
Tan imparable como lo fue la reacción del equipo, que puso bajo su control el partido un rato, con la certeza que le aportó y le aporta siempre la posesión de la pelota, pero con el riesgo de una falta al borde del área a tres minutos del final.
Ahí tomó carrera Cristiano para llevarse el empate. No falló y con un derechazo directo a la cara de España, mató.
Diego Costa, delantero internacional de la selección española, consideró que su equipo mereció ganar ayer el juego ante Portugal. Y es que La Roja mantuvo la posesión del balón en un 61 por ciento, según las estadísticas de la FIFA y por eso el empate les dejó “una sensación rara”.
“Ha sido un partido raro, pero merecimos ganar porque creamos mucho más, tuvimos más la pelota y teníamos el partido controlado”, añadió el delantero.
El jugador del Atlético de Madrid, autor de los dos primeros goles de España, se mostró “muy contento” por haber podido marcar, aunque lamentó que tuvieran el encuentro hecho hasta que una falta a tres minutos de final permitió empatar a Cristiano Ronaldo.
“La verdad es que es una pena, ha sido un partido muy disputado y nos vamos con una sensación un poco rara porque teníamos el partido en nuestra mano y lo hemos dejado escapar”
A su juicio, es un resultado “negativo” tras lo visto en el campo, “aunque son cosas que pasan” en el futbol. “Tenemos que darlo todo, tenemos a nuestra gente y nuestras familias apoyando y tenemos que jugar por ellos”, concluyó.
Delantero de España
SE FUE SATISFECHO
Fernando Hierro, seleccionador español, dijo al final de su primer partido con España en el Mundial que “el equipo ha levantado por dos veces el marcador, nunca dejó de creer y eso me dejó muy satisfecho con el rendimiento del equipo”.
“Cuando mejor estábamos nos han empatado, no es fácil remontar, nos hemos sobrepuesto a todo tipo de adversidades, el equipo tuvo personalidad”, apuntó Hierro, quien al ser cuestionado en por el gran partido de Diego Costa, dijo que estuvo “muy bien en líneas generales igual que el resto de la selección”.
FORTALECIDOS
En la misma línea que su compañero, Diego Costa, Isco Alarcón, lamentó el empate a tres goles ante Portugal cuando tenían el partido encarrilado y, aunque opinó que su equipo mereció más, recordó que esto solo acaba de empezar.
“Hemos merecido un poco más, el empate nos sabe a poco pero también nos da muchas fuerzas”, declaró el malagueño, para quien España ha demostrado que tiene “mucho corazón, orgullo y ganas de hacer las cosas bien” y por ello ha peleado y ha sido capaz de remontar en dos ocasiones.
“Es un Mundial y nadie te va a regalar nada. Estoy muy orgulloso por el rendimiento del equipo”, añadió el centrocampista del Real Madrid.
En su opinión “esto es futbol y a veces pasan estas cosas que no tienes planeadas o no esperas que vayan a pasar”, aunque la selección española ha luchado y lo ha dejado todo en el campo en su debut mundialista.
“El equipo contrario también tiene virtudes y las hemos intentado contrarrestar al máximo”, añadió Isco y lo que hizo España habla bien de sus líneas generales y sobre todo del buen ánimo que hay en el vestidor, pese al caos que se dio previo a la justa.