Coparmex rechaza regularización de los autos chocolate
Son vehículos chatarra que no circulan en EU dada su antigüedad tecnológica, acusa
Uno de los principales factores que dañan al sector automotor en México son los programas de origen político que buscan regularizar vehículos que entran ilegalmente al país, conocidos como autos chocolate, aseguró la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
En su comentario semanal, el presidente del organismo, Gustavo de Hoyos Walther, señaló que en el último año la industria automotriz ha sufrido caídas en las ventas de autos ligeros y vehículos pesados, misma situación que han vivido las tres principales marcas en el país: Nissan, General Motors y Volkswagen.
Señaló que la producción y venta de automóviles en la economía formal son afectados por “programas de inspiración política para la regularización de vehículos internados ilegalmente al país —autos chocolate—, y de forma emergente una propuesta que ha esbozado el futuro gobierno federal, en el sentido de recorrer 30 kilómetros hacia el sur las aduanas de la frontera norte para crear de forma repentina una zona franca”.
El dirigente empresarial expuso que la introducción ilegal hacia territorio mexicano de autos chatarra, que por su antigüedad y obsolescencia tecnológica ya no circulan en Estados Unidos, compromete la seguridad vial en calles y carreteras, por lo que pone en riesgo la seguridad pública de México. “El contrabando de vehículos es frecuentemente ignorado por las autoridades federales y su libre circulación solapada por
Las tres principales marcas del país sufren caídas en ventas, señala Gustavo de Hoyos
muchas autoridades locales y municipales, contribuyendo con esas omisiones al debilitamiento del mercado interno y del sector automotriz”, afirmó.
De Hoyos destacó que varios gobernadores en el país han propuesto regularizar estos vehículos a través de un engomado que les permita circular. “Nuestro más enérgico rechazo a estas medidas de clara orientación política”. “Cabe aclarar algo: la regularización no significa legalización. Solo normaliza y vuelve recurrente el contrabando de vehículos al territorio nacional. La regularización de los vehículos usados, internados como contrabando, tiene el potencial de agravar la situación que hoy atraviesa la industria automotriz mexicana”.
Explicó que si se quiere acabar con el contrabando de vehículos es necesario incluir un planteamiento integral del problema, que aborde la necesidad de crear transporte público digno y de calidad, para aquellos que no tienen acceso a ingresos que les permitan comprar autos. “Se debe considerar el tema dentro de las renegociaciones del Tratado de Libre Comercio; sin una normativa fortalecida no se puede otorgar seguridad jurídica a quienes importan vehículos dentro de la ley, y será inevitable que México sea el basurero regional de vehículos obsoletos provenientes del resto de Norteamérica”. m