Todo era miel sobre hojuelas, caricias de seda, transición de terciopelo y, de pronto, alguien empuja un cuerpo al abismo
Otro misterio sin resolver: el gobernador-senador o senador-gobernador, o gobernador-gobernador, o senadorsenador, o como usted quiera y mande, Manuel Velasco afirmó a pie juntillas que no existe relación alguna entre la aprobación de su licencia para separarse del cargo de senador y la incorporación de cinco diputados del PVEM a la bancada de Morena en la Cámara de Diputados.
Gil hace una pausa dramática: de verdad qué castigo divino, qué desgracia que un estado de la República mexicana tenga un gobernador como Manuel Velasco, una verdadera tragedia. Gil gritó: ¡llamas a mí! Qué políticos más cínicos, desvergonzados, ineptos e impresentables. “No existe ninguna relación entre la aprobación de mi licencia al Senado y la decisión de diputados del Partido Verde de formar parte de otro grupo parlamentario”. Anjá, sí. Cómo ño. Y Morena hizo su primera gran exhibición: que sí, que no, el ruletero. Arturo Escobar, coordinador del Verde en la Cámara de Diputados, reconoció que tuvo una negociación con Mario Delgado para que les cediera cinco diputados y alcanzara así Morena la mayoría absoluta. Gil no se espanta, faltaba más, así se hacen las mayorías, pero caracho, el señor Velasco es un asco (asco-asco).
Al paso que vamos, Morena tendrá una mayoría de 498 diputados, o los que usted quiera y mande, una mayoría monstruosa, sin contrapeso alguno. Gil lo leyó en su periódico Reforma. Por lo mismo, el presidente electo Liópez exigió a los diputados del partido que encabeza, y del que es dueño absoluto, comportarse de forma decente, respetar a la oposición, no marearse con el poder, tampoco pedir moches, ni caer en gritos y estridencias. Con el Presidente electo no hay tu tía, y muchos diputados andan en el lomo de un venado y esto no tiene precedentes y en fon. ¿Escuchaste, Noroña? Jiji. Divertido. Gamés no cesa, el centro de acopio de citas del populismo sigue recibiendo tabletas aforísticas, pañales reflexivos, conceptos enlatados; por favor, no manden historias perecederas, ni ropa muy leída. Del libro de Federico Finchelstein: Del fascismo al populismo en la historia (Taurus, 2018): “En el centro de las teología de populismo yacen ideas de soberanía popular. En la práctica, estas formas dobles de representación engendraban conceptos unitarios del pueblo, posturas intolerantes, ataques a la libertad de expresión e incluso conceptos plebiscitarios del pueblo y delegativos de la democracia, pero no el fin de la democracia misma. En este contexto, el líder populista es líder por la fe que, supone, el pueblo tiene en él o en su liderazgo. Los líderes actúan como la personificación de la voluntad popular, y no sólo porque hayan sido elegidos por el pueblo. Al transformase en el pueblo, el líder pasa a ser una figura trascendental única, incomparable, homogénea y comparable al pueblo”.
Todo es muy raro caracho. Como diría Oscar Wilde: El verdadero misterio del mundo es lo visible, no lo invisible. m