Camada de irrupción tardía
Entre Liga y Ascenso, hay varios entrenadores que se encuentran en la franja de los 50 años; su oportunidad, en la mayoría de los casos, sucedió por circunstancias lejanas a su capacidad
En la lista que publicó el Inegi en mayo pasado sobre el porcentaje de ocupación laboral formal, la tasa de participación era de 59.7% en todo el país. De ahí, el propio instituto desmenuzaba sobre los rangos de edad, desde los 15 años, hasta los jubilados. En el futbol mexicano existe una categoría distinta. Varios entrenadores que oscilan o rebasan las 50 primaveras, apenas están teniendo su primera gran oportunidad en el máximo circuito y contrario a lo que podría esperarse, no lo están haciendo mal; en la categoría de plata, en el Ascenso, también hay un nutrido grupo.
Criticado hasta por sus expresiones en conferencia de prensa, David Patiño ha padecido en el banquillo de Pumas, donde se mantiene. A finales del año anterior tomó al equipo en puestos de descenso y con escaso margen para mejorar su posición; aun así, terminó con decoro el certamen y al siguiente semestre, prácticamente con la misma plantilla, los clasificó a la Liguilla. Hoy, a pesar de acumular ciertos encuentros sin victoria, se mantiene en el cuarto peldaño general, con 14 unidades. A sus 50 años, tiene su primera gran oportunidad seria en Primera División, lejos de interinatos.
Otra de las grandes sorpresas y no nuevas es la presencia de Roberto Hernández. A inicios de 2017, con Monarcas Morelia al borde del abismo, con graves problemas de descenso y por si fuera poco, con el desaire de varios estrategas para asumir el cargo, el entonces director deportivo tuvo que remangarse la camisa y aportar sus conocimientos desde el banquillo. Pocos auguraban buen puerto con esta apuesta… El tiempo brindaría otros dividendos. Hoy, mencionar la gestión de Hernández es hacerlo de un estratega capaz, que desde su arribo, acumula tres boletos consecutivos a la Liguilla.
En un escenario totalmente atípico, Salvador Reyes terminó por hacerse cargo de la dirección técnica de Santos Laguna, el vigente campeón del futbol mexicano. Una polémica en el interior del vestidor de los Guerreros y muchas versiones, terminaron por precipitar el final de la gestión del uruguayo Robert Dante Siboldi con los de Torreón, ya iniciado el Apertura 2018. Hasta ahora, Chava completa cinco encuentros de Liga dirigidos, dos triunfos, dos empates y un solo descalabro, posicionando a los suyos en puestos de Liguilla, con 14 unidades y la posibilidad de repetir el cetro de monarca.
El fenómeno de la camada tardía en el balompié nacional no conoce de categorías y se repite incluso en el Ascenso Mx. Al igual que en el máximo circuito, hay tres entrenadores en la franja de los 50 años, cuyas carreras han atravesado de todo un poco y que por ahora, tratan de afianzarse, aunque sea en esta división. El primer caso es el de Alfonso Sosa, que a cargo del Atlético de San Luis ha encontrado buen desempeño y la suma suficiente de puntos para colocar a los potosinos en puestos de honor (cuarto lugar). Con 11 puntos, los dirigidos por Poncho completan tres triunfos, dos empates y un descalabro.
Luego de un par de años al frente del Atlas y hasta como auxiliar de Chivas, Juan Carlos Chávez se refugió en la división de ascenso para seguir con su carrera como entrenador. Desde mediados del 2014, ha dirigido a Mérida, Venados, Cimarrones y ahora Correcaminos. En su primer semestre con los de Tamaulipas, el entrenador de 51 años ha tenido un arranque de cierta regularidad, con dos triunfos, dos empates y tres derrotas. No es una labor sencilla y menos, para el que en algún momento fuera responsable de las selecciones mexicanas con límite de edad, incluso galardonado en un Mundial Sub 20.
El último ejemplo de la lista en el Ascenso es el de un tipo acostumbrado y aclimatado a las hostilidades de esta rama. Ricardo Rayas, que como futbolista registró una trayectoria discreta, en su mayoría con los Tiburones Rojos de Veracruz, como entrenador ha buscado una revancha que hasta ahora sigue pendiente. Desde 2006 inició con un camino que lo ha ligado a instituciones de Segunda División, como Unión de Curtidores, o bien, otras de la categoría de plata, como Irapuato, Dorados, Mineros, Correcaminos y Alebrijes, su actual responsabilidad, por segunda ocasión.