Grave, un miembro del grupo Pussy Riot

Un miembro del grupo de punk Pussy Riot fue llevado esta semana a un hospital en condición grave como consecuencia de un posible envenenamiento, de acuerdo con reportes de noticias rusos.

La radio Ekho Moskvy y el portal de noticias en línea Meduza reportaron el miércoles que Pyotr Verzilov ha estado en cuidados de emergencia desde la tarde del martes.

Otra integrante de Pussy Riot, Veronika Nikulshina, aseguró que entre los síntomas de Verzilov están la pérdida de la vista y la capacidad de hablar, reportaron los medios rusos.

Nikulshina explicó que Verzilov es atendido en la unidad de toxicología de un hospital de Moscú, lo que indica que se sospecha de envenenamiento.

Verzilov, Nikulshina y otros dos activistas cumplieron sentencias de 15 días en prisión por interrumpir la final de la Copa Mundial de futbol en julio pasado.

Ingresaron al campo con uniformes de policía e interrumpieron brevemente el partido entre Francia y Croacia. Pussy Riot argumentó entonces que era una protesta contra el poder excesivo de la policía en Rusia.

Desde el 8 de agosto pasado, el servicio secreto interno de Rusia (FSB) le prohibió a Maria Aliojina, una de las principales activistas del colectivo de punk feminista, viajar al exterior del país.

Aliojina se dio a conocer en 2012 cuando, junto con otras activistas de Pussy Riot, criticó al gobierno de Vladímir Putin en una especie de “rezo punk” en la catedral de Cristo Salvador de la capital rusa.

Entonces, bajo el canto “Madre de dios, expulsa a Putin”, el grupo de mujeres interrumpió, con las cabezas cubiertas con pasamontañas, en el templo como una forma de protestar por el apoyo otorgado por la jerarquía ortodoxa al mandatario que entonces, había obtenido su reelección.

Aliojina y otra activista fueron condenadas a dos años de privación de libertad en un campo de internamiento. En 2013 fueron indultadas en el marco de “apertura” rusa con motivo de las olimpiadas de invierno 2014 en Sochi. m