Sin Canadá, EU ganará en contenido mínimo de autos
Estar siempre a la defensiva impidió a México hacer propuestas, dice
Si Canadá declina unirse al Tratado de Libre Comercio (TLC) modernizado con México y Estados Unidos, entonces Washington tendrá garantizado un contenido nacional mínimo en cada auto armado en México, señaló el especialista en comercio internacional del bufete King & Spalding, Jorge Miranda. Agregó que el requisito de que entre 40 a 45 por ciento de un auto se fabrique en zonas donde se paga por lo menos 16 dólares por hora, como acordaron México y Estados Unidos, quedó como una garantía independientemente de lo que pasara con Canadá.
“Si al final Canadá declina unirse al TLC 2.0, entonces esta cifra del 40 al 45 por ciento se traduciría en un piso automático para el contenido originado en Estados Unidos”, subrayó.
El especialista, señaló que no es probable que se eleven los salarios industriales mexicanos hasta este nivel, sino que funcione para establecer un contenido automático, como quiso el gobierno de Donald Trump desde el inicio de la negociación.
Miranda señaló que reservar una cierta proporción de contenido regional para un país miembro en particular sería una primicia histórica en un Tratado de Libre Comercio. “Esta gran concesión por parte de México podría haber sido a cambio de que los Estados Unidos se comprometieran a eximir a México de cualquier medida futura sobre las importaciones de automóviles”, subrayó.
Señalo que la implementación de una nueva norma de contenido regional en autos, que según los informes aumentará el contenido regional de 62.5 a 75 por ciento, obligará a ciertos fabricantes de automóviles en México a reorganizar sus cadenas de suministro para obtener una mayor proporción de partes y materiales de proveedores regionales.
Explicó que a lo largo del proceso de renegociación, México rechazó cada propuesta nociva presentada por los Estados Unidos, pero el hecho de estar siempre a la defensiva impidió que presentara propuestas propias que hubieran impulsado aún más las exportaciones de los Estados Unidos, sin cambios a los sectores funcionales.
Por ejemplo dijo, México pudo haber negociado reducir el déficit de los Estados Unidos en su balanza comercial con nuestro país, el supuesto objetivo fundamental de la renegociación del TLC desde la perspectiva de Donald Trump.
Miranda señaló que sin afectar los términos que México ganó en el TLC de 1994, en particular, pudo haber ofrecido que su tasa arancelaria aplicada, casi un 7 por ciento en promedio, aumentara y se acercara mucho más a su tipo arancelario consolidado ante la organización Mundial del Comercio (OMC), que es de 36 por ciento, en promedio.
Explicó que todos los países con los que México ha firmado un TLC habrían quedado exentos de este aumento arancelario. m