Jorge, arma de doble filo
El lateral fue la luz de América en el juego contra Morelia. A perfil cambiado, su gol marcó el desequilibrio para que las Águilas siguieran en la parte alta de la tabla Tengo la esperanza de jugar en donde sea, donde me pongan voy a trabajar a muerte y d
El sábado, América logró tres puntos clave que le permiten seguir en lo alto de la tvabla y al acecho del liderato que se encuentra en manos de Cruz Azul, solo lo separan tres puntos de La Máquina. Las Águilas se ubican en el tercer lugar de la tabla general, porque Pumas tiene mejor diferencia. La carrera por la cima se pondrá más interesante semana a semana.
Es cierto que el cuadro de Coapa está lejos de mostrar una versión futbolística que convenza. El equipo del Piojo no se muestra reconocible; más bien, el triunfo ante Morelia lo cocinó en el plano individual, en el atrevimiento que tuvo un joven futbolista y no los elementos que acumulan más galones en el conjunto azulcrema. Cuando el equipo lucía espeso sobre la cancha, apareció Jorge Sánchez, un chico de 20 años que jugó como lateral por izquierda. El Piojo tuvo que improvisar ante las bajas por lesión de Luis Reyes y Carlos Vargas, los elementos naturales con los que cuenta América para jugar dicha posición.
En apariencia no habría problema para ello, porque la tarea de creación de juego no recaería en Jorge, aunque en la medida de sus posibilidades tendría que buscar darle profundidad al equipo, agregándose por esa banda para mostrarse como una opción de pase y que pudiera enviar algún centro a los delanteros.
El asunto es que la imagen ofensiva de las Águilas no funcionaba como se deseaba, el equipo no encontraba profundidad ni puntos de remate. Cecilio Domínguez y Andrés Ibargüen no lograban conducir al equipo. Y América apenas había exigido a Sebastián Sosa con un par de cabezazos que no asustaron a los michoacanos.
Casi a la media hora de juego, los americanistas lucían opacos. Fue Jorge Sánchez el que rompió el tedio. El defensa azulcrema mostró esa cuota de valor que reclama la playera de América, ese atrevimiento para marcar diferencia sin importar que su principal función fuera destruir y no construir.
Sánchez tuvo la visión de anticiparse para robar una pelota en la salida de Morelia, interceptó un cambio de juego y avanzó un par de metros para después sacar un fuerte derechazo que doblegó a Sebastián Sosa. Jorge abrió la lata desde una zona en la que jugó de manera improvisada, porque si
Defensa de América