Viajes
Se ha puesto de moda pensar en Tailandia y, en general, en el sudeste asiático como un destino lunamielero, debido a que los wedding planners han hecho de las playas y ciudades tailandesas un destino romántico. Sin embargo, el destino es mucho más que eso; también es un gran lugar para familias que quieren disfrutar de lo exótico que tiene Bangkok para ofrecer. Decenas de agencias de viajes tienen recorridos preestablecidos por Tailandia y los países vecinos de la península indochina. Sin embargo, después de buscar en internet y encontrar las mejores opciones, nos dimos cuenta de que es más sencillo y económico armar uno mismo el viaje. Además Tailandia es un país muy amigable y relativamente sencillo de recorrer, incluso con carriolas.
Lo primero que debemos hacer es tramitar el visado tailandés, que cuesta 35 dólares por una entrada y en tres días se hace el trámite en la sección consular de la embajada, ubicado en Paseo de las Palmas. Los requisitos son sencillos, pues lo que más les interesa es comprobar la solvencia económica y que el viaje será solo con fines turísticos.
Volar a Tailandia no es tan complejo como parece, la mejor opción costo-beneficio que encontramos fue a través de KLM, volando de la Ciudad de México a Amsterdam en su legendario Jumbo 747 y, tras un par de horas, hicimos conexión hacia Bangkok en un cómodo Boeing 777, con servicio de comidas abordo en todas las clases. Esto facilita en gran medida, transportarse con los hijos más pequeños.
Tanto el aeropuerto de Amsterdam como el de Bangkok son muy amigables para las familias, incluso llevando carriolas y niños pequeños, pues tienen lugares de recreo para infantes y líneas de atención especial para familias. Llegando a Bangkok es sencillo moverse en taxi, ya que son relativamente económicos. Aún así, lo más recomendable es la aplicación Grab, un equivalente a Uber asiático, con el cual se obtienen tarifas más bajas y se controla todo desde el celular.
Las calles, centros comerciales, estaciones de metro tienen muy buena accesibilidad para familias con niños pequeños, pues cuentan con elevadores, así que ir en familia no representa un problema.