MURAL Y LIENZO
En primer lugar hay una enorme diferencia entre un mural y un cuadro de caballete, porque un cuadro de caballete es de dimensiones muy reducidas y es para ser adquirido por alguna persona que quiere llevarlo a su casa. Entonces quienes lo ven son la familia y los íntimos amigos, son los que pueden admirar esa obra. En cambio, un mural es para un edificio público, de ahí vienen los millones de espectadores que pueden verlo, de todas las nacionalidades y edades, y tiene un alcance de difusión mucho mayor, no solamente para los contemporáneos, sino para los que nos van a llegar después.