Tomarían la estafeta
En las últimas dos décadas, la portería de la selección mexicana ha sido la posición que menos dolores de cabeza le ha dado al respectivo seleccionador nacional. ¿La razón? La gran lucha que ha existido por ocupar el puesto titular.
Sí, en estos 20 años la portería se ha concentrado en nombres propios: Oswaldo Sánchez, Óscar Pérez, Guillermo Ochoa y Jesús Corona; aunque también se han colado algunos otros como el de Moisés Muñoz, Alfredo Talavera o Luis Ernesto Michel, pero estos cuatro acapararon los mejores torneos; Oswaldo y el Conejo batallaron de 1998 a 2010, en tanto que Memo y Chuy, hasta la fecha.
Ahora, tal parece que iniciará una nueva rivalidad, protagonizada por dos jóvenes porteros que desde las categorías inferiores ya venían luchando palmo a palmo por ser el titular. La lucha que se vislumbra es la de Raúl Gudiño y Gibrán Lajud.
Incluso, para esta Fecha FIFA, ambos porteros por fin coinciden en selección mayor, pues mientras Lajud ya había sido considerado en el proceso de Juan Carlos Osorio, en el que no jugó un solo minuto, Gudiño apenas recibe su primera convocatoria al representativo mayor gracias a las buenas actuaciones que ha tenido con Chivas.
Eso sí, de entrada, ambos pelearán por ser el segundo de Guillermo Ochoa, pues todo indica que el portero del Standard de Lieja alcanzará a cubrir un proceso mundialista más, pues a sus 33 años (llegaría con 37 para la justa en Qatar) luce en gran momento y se perfila para ser uno de los referentes de experiencia que quede para el renovado grupo del Tricolor.
DIFERENTE DESARROLLO
Pero la historia de Gudiño y Lajud ha sido muy diferente. Por un lado, Raúl ha tenido un inicio muy prometedor. En 2011 se dio a conocer con el título del Mundial Sub 2017 que se celebró en el país, ahí lució como el portero titular del equipo que dirigía Raúl Gutiérrez.
Su nivel atrajo la atención del Porto, que primero consiguió su préstamo con Chivas –equipo en el que no alcanzó a debutar– y luego su compra. Se fogueó en la filial del conjunto portugués y luego fue prestado a otros clubes, como el Uniao da Madeira y el APOEL de Nicosia, conjunto con octubre de 2018 el que se convirtió en el primer mexicano en jugar en la Champions League.
Ahora regresó al futbol mexicano con Chivas y sus buenas actuaciones provocaron su primer llamado al Tricolor.
En tanto, Gibrán Lajud ha tenido que batallar para hacerse un hueco en la Liga Mx. Desde su formación en Cruz Azul, tuvo muy en claro que no podía desbancar a José de Jesús Corona, por lo que fue cedido a los Xolos de Tijuana; ahí empezó la lucha contra otro grande, como el argentino Federico Vilar, al que terminó por sentar.
Tijuana se hizo de sus derechos federativos y Gibrán se ha consolidado como el titular de Xolos; el torneo pasado fue el portero con menos goles recibidos.
BATALLA DESDE LAS INFERIORES
Y la lucha de Gudiño y Gibrán se remonta desde la selección Sub 23 que se perfilaba para disputar los Juegos Olímpicos de Brasil 2016. En 2015 ambos acudieron al Preolímpico de Canadá, y ahí Raúl Gutiérrez se decantó por Gibrán, quien ya venía con el proceso completo.
Al año siguiente, ambos fueron considerados para el Esperanzas de Toulon, en el que de nuevo Gibran tuvo la titularidad, aunque Gudiño recibió la oportunidad de jugar el partido ante la República Checa.
Finalmente, para la justa olímpica, Gudiño ya no fue considerado, mientras que Lajud sí; sin embargo, el portero de Xolos no jugó ningún minuto, pues el Potro Gutiérrez llevó a Alfredo Talavera como uno de los tres refuerzos mayores de 23 años.
Ahora, ambos podrían ser la nueva dupla que pelee por la titularidad de la portería del Tricolor.