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se utilizaron en los Juegos Olímpicos de México 1968, de las cuales, 27 fueron acondicionadas para ser sede del certamen. la cual se encontraba dentro del centro comercial Minimax, y que fue demolido en los 70s, y ahora ya se encuentra Plaza Inn.

Sin embargo, hay otras instalaciones que estuvieron muchos años en el olvido, pero ahora han sido rescatadas por el Indeporte de la Ciudad de México con el fin de remodelarlas, tal caso fue la de la Alberca Francisco Márquez, la Pista de Remo y Canotaje Virgilio Uribe y la Sala de Armas, donde se celebraron las pruebas de esgrima.

Aun así, con 50 años de existencia de los inmuebles , ex deportistas y dirigentes sienten que México 1968 dejó un buen legado en cuanto a instalaciones deportivas y que ello se podría aprovechar para realizar de nueva cuenta una magna justa.

“Si pedimos unos Juegos Olímpicos se deben hacer unas instalaciones nuevas, pero también hay inmuebles que todavía funcionan, varios de ellos están en funcionamiento, que se hicieron bien y se siguen utilizando de la mejor forma. Creo que el legado que dejó México 1968 en cuanto a instalaciones fue magnífico para nosotros, como lo dejó Guadalajara en los Juegos Panamericanos del 2011”, mencionó el ex nadador Felipe Múñoz, quien logró el oro en aquellos Olímpicos.

Por su parte, el presidente del Comité Olímpico Mexicano, Carlos Padilla, indicó que no solo la Ciudad de México tiene las condiciones adecuadas para volver a realizar una justa olímpica.

“No solamente son las instalaciones, sino el legado de la cultura olímpica y lo estamos viviendo en estas celebraciones de los Juegos Olímpicos de México 1968. Es difícil hablar a la distancia, pero México tiene la capacidad de eso y más, y de organizar los Juegos Olímpicos, pero no necesariamente en la Ciudad de México, sino en en otras ciudades como Monterrey, Guadalajara o Tijuana, donde se podrían realizar de manera extraordinaria”, mencionó el titular del Comité Olímpico Mexicano.