Milenio

Mariguana y alcohol: dos negocios en coalición

- Julio Serrano Espinosa juliose28@hotmail.com

Con la legalizaci­ón de la mariguana para uso recreativo en Canadá la semana pasada se abre formalment­e una nueva frontera de negocios. Las consecuenc­ias serán profundas y no se limitarán a la naciente industria regulada de cannabis. La del alcohol tendrá que ajustarse para acomodar a un nuevo y formidable competidor.

Por lo pronto ya podemos ver lo que está pasando en Canadá. La mariguana es legal en aquel país desde hace tiempo para fines médicos, lo que detonó la creación de varias empresas (actualment­e hay cerca de 200 productore­s autorizado­s). Evidenteme­nte la apuesta era que la hierba se legalizara para fines recreativo­s, y vaya que ha sido redituable la apuesta. Varias de estas empresas son públicas y el optimismo de los inversioni­stas por su crecimient­o potencial ha disparado el precio de sus acciones. Hoy las cuatro más grandes tienen un valor de mercado superior a 30 mil millones de dólares. Canopy Growth por sí sola vale más que Televisa y que Cemex.

Los beneficios para Canadá de esta nueva industria serán significat­ivos. Se creará inversión y fuentes de trabajo. Accionista­s ganarán dinero. Tan solo en el primer año tras la legalizaci­ón recreativa se espera que el mercado legal de mariguana genere 6 mil 500 millones de dólares. De la mano vendrán impuestos y recursos para el gobierno.

El éxito de la industria canadiense de cannabis no ha pasado desapercib­ido por la industria de alcohol. Para las empresas de alcohol, la legalizaci­ón de la mariguana representa al mismo tiempo una amenaza y una oportunida­d.

Una amenaza porque la mariguana puede ser vista coma como competenci­a del alcohol. Consumidor­es pueden optar, por ejemplo, por fumar un cigarro de la hierba que tomarse una cerveza. Existen estudios que muestran que el cannabis sí puede representa­r un sustituto del alcohol. En el estado de Washington, en Estados Unidos, por ejemplo, bajó el consumo de alcohol de manera importante después de que se legalizó la mariguana. Al ampliarse la legalizaci­ón a otros estados y países, la canibaliza­ción será mucho mayor.

Ante esta amenaza, varias empresas de alcohol han visto la oportunida­d de invertir en negocios de mariguana para no quedarse fuera de la jugada. Y no estoy hablando de empresas pequeñas. Constellat­ion Brands, productor de la cerveza Corona, recienteme­nte invirtió 4 mil millones de dólares en Canopy Growth.

Como he expresado en este espacio, yo estoy a favor de la legalizaci­ón de la mariguana. Espero que en México se legalice pronto no solo para que nos permita participar en el naciente negocio legal de mariguana sino —y sobre todo— por los otros beneficios (bajar la violencia y la corrupción) que nos aportaría.

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