Milenio

Las porras invertirán papeles

Para el partido del sábado, los grupos de animación del América se situarán en la cabecera destinada para los visitantes y los de Cruz Azul en uno de los sitios habituales de las Águilas

- Higinio Robles León/ Ciudad de México LA

Han pasado 22 años y 10 meses desde la última vez que Cruz Azul se enfrentó al América ejerciendo como local administra­tivo en el estadio Azteca. Al final de la temporada 1995-96, que también marcó el final de los torneos largos, La Máquina se mudó al estadio Azul, en el que permaneció hasta la conclusión del pasado Clausura 2018.

Aquel 2 de diciembre de 1996, Cruz Azul empató 1-1 con América. Las Águilas se habían puesto en ventaja al minuto 3 con un gol del camerunés François OmamBiyik, pero en el minuto 45 Héctor Islas emparejó la pizarra. Eran los años en los que uno y otro vivían momentos diferentes, en lo único en lo que coincidían era en la búsqueda constante del título de Liga. A La Máquina se le había negado desde el torneo 1979-80, cuando venció a Pumas. Y a los de Coapa desde la campaña 1988-89, en la que se impusieron, precisamen­te, al cuadro celeste.

Eran los días en los que el ambiente en el estadio era completame­nte familiar, no se vislumbrab­an lo que ahora son las porras. Los dos equipos habían logrado ya un arraigo importante por lo que habían logrado antaño. El dominio celeste se dio en los años 70 y el americanis­ta en los 80. Sus aficionado­s estaban bien identifica­dos con sus colores.

Dos décadas después, ambos se verán las caras este sábado en el Azteca, con los papeles administra­tivos a favor de La Máquina. Igual que hace 20 años, pero con matices diferentes. Cada equipo cuenta con sus grupos de animación bien identifica­dos que incluso han protagoniz­ado episodios bochornoso­s.

Aunque hace tiempo no hay fricciones entre seguidores de ambos clubes, es considerad­o un partido de alto riesgo por la cantidad de personas que acudirán al Coloso de Santa Úrsula, y más porque puede haber algún momento en el que pudieran llegar a cruzarse seguidores celestes y azulcremas; sin embargo, la autoridad hará todo lo posible para que esto no ocurra.

Desde el inicio del torneo, la directiva celeste generó una campaña en redes sociales en las que destacó su regreso al Azteca con hashtags como #LlegóLaMáq­uina que buscaron revitaliza­r ese vínculo emocional con sus aficionado­s.

La respuesta de los seguidores americanis­tas fue de rechazo, en las mismas redes sociales manifestar­on su descontent­o por abrirle la puerta del Azteca a Cruz Azul. Algunos tuiteros llamaron al cuadro celeste “arrimado” y han dejado claro en lo que del Apertura 2018 que el campo le pertenece al América, reiterando que la empresa dueña de las Águilas también controla el inmueble.

NO SE MUEVEN

El regreso de Cruz Azul al Azteca generó la interrogan­te de cuál sería la ubicación de sus aficionado­s en sus duelos de local. Se decidió que fuera en el mismo sitio que suele ocupar La Monumental, es decir, en la cabecera norte del inmueble, con la salvedad de que aparecería un escudo de los celestes para tapar los distintivo­s de los azulcremas.

No había problema, pero conforme se fue acercando la Jornada 14 se especulaba con que los aficionado­s de Cruz Azul (que serán locales) se moverían a la cabecera sur, el sitio que ocupan siempre los aficionado­s visitantes. Hubo negociacio­nes para que eso ocurriera, pero no prosperaro­n y se mantuvo el plan inicial.

Los seguidores del América ejercerán como visitantes. Ingresarán como bloque por la misma zona que ocupa cada porra que visita el Azteca. Los grupos de animación de América (Ritual del Kaoz, Monumental y Disturbio) se concentrar­án en el Parque de los Periodista­s Ilustres, en la alcaldía Venustiano Carranza y de ahí partirán en caravana custodiado­s por elementos de la SSP e ingresarán por la puerta 8 al estacionam­iento C del inmueble. Y de ahí a la cabecera sur.

Los aficionado­s de Cruz Azul llegarán en dos grupos. Los de la Ciudad de México y los de Ciudad Cooperativ­a, siendo este grupo el más numeroso, pues se espera que sean alrededor de 25 autobuses los que vengan de Hidalgo. Ingresarán por la puerta 3 y se concentrar­án en el estacionam­iento D, el que es para el público en general y de ahí ingresarán a la cabecera norte.

En las redes sociales, los seguidores del América advierten que le harán sentir al local administra­tivo quién es el dueño del Coloso de Santa Úrsula.

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Los aficionado­s de América y Cruz Azul nunca abandonan a sus respectivo­s equipos
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