EL CIRCUITO DE MAX
El holandés ganó otra vez en México, tras liderar desde la primera vuelta
Los aficionados aquí son muy apasionados y siempre que ganas una carrera es algo positivo”
No creo que sea uno de mis circuitos favoritos, a pesar que puedo conseguir buenos resultados” MAX VERSTAPPEN Piloto de Red Bull
La tercera etapa del Gran Premio de México de Fórmula Uno ya tiene un nombre propio. El holandés Max Verstappen (Red Bull) se convirtió en el primer piloto en ganar en más de una ocasión en el circuito desde que reapareció en el calendario de la máxima categoría en 2015 y ha dejado en claro que es un trazado que favorece a los autos del equipo austriaco.
El holandés dominó de principio a fin el fin de semana en México. Solo con un parpadeo en la calificación, cuando su compañero de escudería, el australiano Daniel Ricciardo, le robó la posición de privilegio en una vuelta inigualable. Fue el más rápido en las tres prácticas libres, y el domingo confirmó en la pista lo que había anticipado desde que aterrizó en el país, que si había un lugar donde podía ganar en el resto de la temporada, era éste.
Aunque su triunfo se vio opacado de nuevo por la coronación del británico Lewis Hamilton (Mercedes), el de 21 años se siente a gusto en el Autódromo Hermanos Rodríguez, donde fue bajado del podio en 2016 después de recibir una sanción por un toque con el alemán Sebastian Vettel (Ferrari), pero donde se impuso la campaña anterior.
“Es un lugar bueno para nosotros, hay más trabajo mecánico, la velocidad punta no es tan importante porque no pierdes mucho en las rectas por la altitud, así que me gusta manejar aquí, pero no creo que sea uno de mis circuitos favoritos, a pesar que puedo conseguir buenos resultados”, explicó.
Desde la salida, Verstappen dejó claras sus intenciones. Se lanzó por el primer lugar ante la mala arrancada de Ricciardo y peleó por ese puesto con Hamilton, ganó la posición y se escapó para alejarse poco a poco del resto de la parrilla, aunque por detrás hubo incidentes en esa primera vuelta, con un toque entre el finlandés Valtteri Bottas (Mercedes) y Vettel, y otro que involucró al francés Esteban Ocon (Force India) y al alemán Nico Hülkenberg (Renault).
El auto rosa perdió el ala de su auto, que impactó con el español Fernando Alonso (McLaren) para dejarlo fuera de competencia, decepción para el ibérico, quien recibió un gran homenaje en los minutos previos a la competencia, pero que otra vez tuvo poco fortuna en México.
En la vuelta 13, Verstappen entró a pits para cambiar las llantas ultrasuaves por supersuaves y cedió el liderato por algunos giros a Vettel, quien también entró a los boxes en la 18.
Hamilton comenzó a sufrir con las llantas supersuaves, pero se mantuvo en el segundo puesto, aunque Vettel superó a Ricciardo para ponerse por detrás; un poco antes Max había superado al español Carlos Sainz (Renault) para sacarle una vuelta y el español sufrió un accidente en el Foro Sol que provocó la aparición del safety car virtual.
Seb superó a Lewis en la vuelta 39 en la búsqueda de alargar el campeonato, lo que no podía suceder si el inglés terminaba entre los primeros siete.
Verstappen incluso se dio el lujo de volver a pasar por los pits y salir en la primera posición, a una distancia cómoda de Vettel, que estuvo a nueve segundos, pero nunca se acercó. Ricciardo pasó a Hamilton, quien bloqueó y continuó con su sufrimiento, a pesar de volver a pasar por los boxes.
Pero la sonrisa del australiano, quien celebró tener una gran calificación, se convirtió en una nueva decepción cuando tuvo que abandonar a 10 vueltas del final, mientras defendía la segunda posición de Vettel, para sumar su octavo retiro en su último año en Red Bull antes de irse a Renault.
El podio lo completó otro Ferrari, el del finlandés Kimi Räikkönen.
Pero el Gran Premio de México parece hecho para Max, un conductor agresivo que cambió el rostro de enojo de la calificación e incluso del desfile de pilotos, por la celebración como DJ en el podio del Hermanos Rodríguez.
“Es algo bueno, sabíamos desde el año pasado que éramos fuertes aquí y llegamos con la misma sensación, aunque nunca sabes lo que pueda pasar en la carrera, estoy contento, es un trazado especial, con aficionados muy apasionados y siempre que ganas una carrera es algo positivo”, señaló el holandés.