Dinosaurios. Nueva especie en Argentina
Se trata de un herbívoro del grupo de saurópodos hallado en Neuquén; sus restos datan de hace 110 millones de años
Un equipo de paleontólogos españoles y argentinos encontraron los restos de tres ejemplares de una nueva especie de dinosaurio, con una antigüedad de 110 millones de años en la provincia argentina de Neuquén, lo que en aquella época era una zona desértica. Fue llamado
y su hallazgo, publicado en la revista especializada fue dado a conocer ayer en Argentina por la Agencia Ciencia, Tecnología y Sociedad (CTyS) de la Universidad Nacional de La Matanza. Según el medio argentino
se trata de un herbívoro rebaquisáurido del grupo de los saurópodos, aquellos cuadrúpedos herbívoros de cuello y cola larga entre los cuales existieron especies gigantescas que pesaban más de 70 toneladas y otras enanas que no superaban los 10 metros de longitud al alcanzar la adultez, y que vivieron desde el Triásico Superior hasta el Cretácico Superior.
“Encontramos la mayor parte de los huesos que corresponden al cráneo: el hocico, las mandíbulas, gran cantidad de dientes. También los que definen la órbita de los ojos, por ejemplo, y de esa manera pudimos hacer una reconstrucción muy completa”, detalló José Luis Carballido, investigador del Museo Egidio Feruglio y del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas de Argentina.
También fueron halladas algunas partes que pertenecen al cuello, la cola y el dorso.
“No solo se trata del descubrimiento de una especie nueva de dinosaurio en un sitio donde
El hallazgo Lavocatisaurus agrioensis.
no se esperaba encontrar fósiles, sino que además el cráneo está prácticamente completo”, añadió Carballido.
Los restos corresponden a un ejemplar adulto con una estatura de unos 12 metros aproximadamente, además, dos juveniles, de alrededor de seis y siete metros. Los paleontólogos creen que los animales andaban en grupo y murieron juntos. “Esto también significó el primer registro de un desplazamiento en grupo dentro de los dinosaurios rebaquisáuridos”, destacó José Ignacio Canudo, de la Universidad de Zaragoza y autor principal del estudio.