Bloqueo. Casi 20 horas de furia en San Juanico
Disturbios. Una incursión de policías capitalinos en Tlalnepantla desató un enfrentamiento con pobladores y una investigación por supuesta brutalidad
La PF liberó anoche la autopista México-Pachuca, luego de que habitantes de Ixhuatepec la tomaran en las primeras horas de la madrugada de ayer en represalia por su puestos abusos de policías deCdMx, que cruza ron a E dom ex para detener a asaltantes; Ami e va acusó que infiltrados provocaron los disturbios. E FE
Tras casi 20 horas de bloqueo, alrededor de 400 elementos de la Policía Federal liberaron la autopista México-Pachuca que pobladores de San Juan Ixhuatepec, del municipio de Tlalnepantla, mantuvieron cerrada desde la madrugada de ayer en protesta por supuestos abusos cometidos por policías de Ciudad de México durante una "persecución" a un presunto delincuente.
El bloqueo de la principal vialidad que comunica a municipios del Edomex, como Ecatepec, y de Hidalgo con la capital inició alrededor de la 1 de la madrugada, cuando un grupo de habitantes tomó la autopista para protestar por la “brutalidad policiaca”.
Desde las 21 horas del domingo, en redes sociales alertaron sobre la llegada de efectivos de Ciudad de México al poblado, ubicado entre la capital y el Estado de México, quienes a su paso por varias calles de la colonia, también conocida como San Juanico, arrasaron con puestos, destrozaron vehículos y dispararon al aire, según vecinos.
Los habitantes denunciaron, con videos en mano, que los efectivos también golpearon a hombres y mujeres que caminaban en la vía pública o grababan las agresiones, e incluso tumbaron a patadas las puertas de viviendas, negocios y de un anexo.
San Juanico no salía de la conmoción cuando las campanas de la iglesia comenzaron a repicar provocando que la gente saliera de sus casas y se reunieran en las inmediaciones de la delegación; tras ello, acordaron el bloqueo de la autopista en el cruce con Periférico, tanto en dirección a Indios Verdes como a Pachuca.
Al grito de "San Juanico pide justicia", decenas de pobladores paralizaron el principal acceso a Ciudad de México, dejando varados a vehículos particulares y del transporte público, mientras cientos de personas caminaban para llegar a sus destinos.
Durante el bloqueo, manifestantes quemaron una patrulla y una motocicleta de la SSP, mientras que "ajenos al pueblo" saquearon una Bodega Aurrerá, pero fueron perseguidos por vecinos de San Juanico y obligados a devolver la mercancía a la tienda.
Mientras que pobladores se mantenían firmes a continuar con el bloqueo, en la parroquia de Santa Rosa de Lima, otro grupo exigía al subsecretario de Operación Policial Zona Norte, Édgar Bautista, que el encargado de ordenar el "operativo" fuera entregado a autoridades mexiquenses.
Alrededor de las 18:40 horas, 400 elementos federales, apoyados por policías capitalinos y mexiquenses, iniciaron el operativo para liberar la autopista, pero fueron recibidos con bombas molotov, piedras y palos que un grupo lanzó desde el carril que conduce a Ciudad de México, pero la agresión duró solo unos minutos y tuvo un saldo blanco.
Tras el repliegue de los inconformes, las autoridades retiraron un tráiler y las barricadas, liberando la autopista a las 19:30 horas.
En entrevista con Liliana Sosa, en MILENIO Televisión, el secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida, aseguró que tras agotar "todas las posibilidades de diálogo racional" para satisfacer las exigencias de los habitantes, se tomó la decisión de desplegar a las fuerzas federales y calificó el operativo de "limpio".
Por la noche, tras un encuentro entre una comitiva de vecinos, encabezada por el párroco Felipe Guzmán, en la Basílica de Guadalupe, el jefe de Gobierno capitalino, José Ramón Amieva, ofreció una disculpa pública por las afectaciones que sufrieron y aclaró que existen 51 averiguaciones previas por estos hechos.
Además, apuntó que los hechos de violencia generados fue-
ron provocados por grupos de infiltrados ajenos a los vecinos.
“Por parte del gobierno ofrezco una disculpa, con el compromiso de que se haga justicia", señaló en conferencia, en la que se acordó no criminalizar a la comunidad, atender a los lesionados durante la incursión y reparar los daños en sus bienes.
“Persecución, no operativo”
Antes, el secretario de Seguridad Pública de Ciudad de México, Raymundo Collins, afirmó que la incursión policiaca a esta zona limítrofe del Estado de México se trató de una "persecución" y no de un operativo.
Explicó que la noche del domingo, policías fueron alertados por el empleado de una gasolinera, ubicada en la colonia Laguna Ticomán, alcaldía de Gustavo A. Madero, que denunció que, con arma de fuego, fue obligado a cargar combustible a un vehículo y lo despojaron de mil 500 pesos.
Los uniformados, según el funcionario capitalino, siguieron el vehículo en el que escapó el implicado y lo interceptaron en Acueducto y avenida Ticomán; en ese momento arribaron taxis del Edomexpararescataralsospechoso, agrediendo a los uniformados y causando destrozos a patrullas.
Por lo anterior, dijo el secretario, se inició una riña en la que agredieron al primer inspector Ricardo Romero, con el indicativo Maya, provocándole un fractura de mandíbula superior e inferior y a otros dos uniformados, por lo que solicitaron más efectivos.
Collins informó que, al re alizar la inspección, al implicado se le encontró un arma y dinero, por lo que fue puesto a disposición de la autoridad ministerial.
Con información de: Cinthya Stettin, Carolina Rivera, Jorge Almazán, Adyr Corral, Gabriel Ortega, Ana Salazar, Lauro Galicia y Jorge Becerril