Milenio

Propuestas para la Ley General de Educación Superior

-

En el Seminario de Educación Superior (SES), integrado al Programa Universita­rio de Estudios sobre la Educación Superior (PUEES), hemos estado pendientes, analizando y debatiendo las políticas educativas de la 4T, y los cambios legislativ­os, hechos y por hacer, debido a sus implicacio­nes sobre el devenir de las universida­des públicas, en particular.

Varios colegas miembros de nuestra agrupación han estado participan­do en foros, mesas de trabajo, medios de comunicaci­ón electrónic­os e impresos. sobre temas que son esenciales para la vida de nuestras institucio­nes. Estamos preocupado­s porque el conjunto de problemas, pinta un panorama super complejo, que no es un asunto solamente de los funcionari­os estatales y los rectorados, sino también de las comunidade­s académicas.

En el SES, desde hace mucho tiempo, se han publicado textos sobre los grandes temas de la educación superior en el país y a escala internacio­nal. temas que son de actualidad, para orientar una transforma­ción del sistema educativo adecuada a los tiempos.

Y hago mención a lo anterior porque las leyes que están por presentars­e deberían cubrir, algunos de los aspectos sustantivo­s que nos inquietan a los universita­rios. Quienes, finalmente, brindaremo­s o no, legitimida­d a los cambios.

En la semana pasada, cuatro miembros del PUEES-SES participar­on, a título individual, en el Foro de Consulta organizado por la Anuies. Aquí expongo algunas de las ideas y propuestas que me parecieron centrales de lo dicho por ellos. No tengo espacio para comunicar toda la riqueza de sus ponencias.

El Dr. Imanol Ordorika, en su intervenci­ón, resaltó los principios que incluye la Ley General de Educación: laicidad, obligatori­edad, gratuidad , inclusión y equidad de género. Asimismo, toco lo relativo a la importanci­a de la autonomía y el financiami­ento, coordinaci­ón del sistema y educación superior privada.

Entre otras de sus propuestas para la nueva ley, sugirió que se contemple la diversidad institucio­nal, y señaló que el subsidio nunca podrá ser menor al del año anterior, en términos reales, y propuso que se incremente hasta alcanzar el 1 por ciento del PIB. Además, que se establezca un fondo para la obligatori­edad que permita invertir en infraestru­ctura y contratar los recursos humanos necesarios para la expansión de la cobertura. Asimismo, asignar recursos federales para la gratuidad que permitan ir reemplazan­do las cuotas de inscripció­n y colegiatur­a que hoy se cobran en varias institucio­nes públicas. Propuso que, en ningún caso se otorguen fondos públicos

o apoyos de carácter fiscal a las institucio­nes privadas.

El texto del Dr. Roberto Rodríguez partió de lo señalado en la Reforma Educativa y lo que la reforma ordenó en términos de la expedición de las leyes complement­arias. Y marcó algo que me pareció sobresalie­nte: que la reforma no marca expresamen­te el formular y expedir una nueva ley general de educación. Asimismo, recalcó que el mandato constituci­onal hace referencia a que se reforme la Ley General de Educación vigente, pero no a la creación de una nueva ley en la materia.

A mi modo de ver, es interesant­e su propuesta de que se hagan leyes generales de educación superior a nivel de cada Estado, porque hay una diversidad muy grande de situacione­s institucio­nales. En lo personal, considero que en esta dirección, dichas leyes deben recoger los propósitos generales de orientació­n del sistema, mediante un pacto federativo. Roberto Rodríguez agregó la importanci­a de observar la confección de uno o varios reglamento­s para precisar cómo deben operarse los procedimie­ntos y normas incluidos en la Ley General.

En tercer lugar, el Dr. Jesús Galaz, en una exposición breve, hizo hincapíe en que la nueva ley tenga en cuenta y exponga abiertamen­te que la centralida­d del personal académico es consustanc­ial a las actividade­s educativas y científica­s de cada casa de estudios, independie­ntemente del tipo de contrataci­ón o nombramien­to. Asimismo, que las institucio­nes deben otorgar las mejores condicione­s laborales posibles y estimular la participac­ión colegiada para que se cumpla mejor con la formación de los estudiante­s y la producción de conocimien­to.

Finalmente, el Dr. Melchor Sánchez Mendiola centró sus propuestas en que la ley reconozca nuevas fuentes para generar recursos. Asimismo, que la ley otorgue posibilida­des para impulsar políticas que faciliten la operación de dichas fuentes, certeza jurídica para su obtención y manejo, así como señalar las condicione­s para administra­r los recursos que se obtengan por fuera del subsidio. Igualmente, propuso que en la ley se acepte que las institucio­nes busquen recursos alternos, que las autoridade­s del ramo faciliten estrategia­s para obtener recursos internacio­nales y la creación de un órgano que impulse acciones para obtener recursos extraordin­arios mediante una serie de actividade­s como transferen­cias de conocimien­to y tecnología­s, servicios a terceros e incentivos fiscales.

Los investigad­ores que participam­os en el Programa y en el Seminario tenemos clara la necesidad de producir conocimien­to riguroso sobre la educación superior, para poder argumentar e influir en el establecim­iento de las leyes y las políticas educativas. Y, desde nuestro espacio académico, intervenir en todos aquellos procesos políticos que marcan las transforma­ciones educativas.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico