Penalizar ayuda afectará más a menores, advierten
La decisión del presidente Donald Trump de limitar el acceso a la ciudadanía o a la residencia permanente a inmigrantes que reciban ayuda pública fue considerada un ataque a la democracia y una forma de “penalizar” el acceso de los niños a la comida, advirtieron varias organizaciones sociales.
La posibilidad de retirar la residencia permanente a quienes sean considerados una “carga pública” tomó por sorpresa a activistas, expertos y conocedores de política pública, quienes coincidieron en que envía un mensaje en contra de la migración.
Bajo esta nueva regla, un inmigrante legal que vive en Estados Unidos será definido como “carga pública” si recibe “uno o más beneficios públicos designados" durante más de 12 meses en un periodo de 36 meses. Estos beneficios públicos incluyen asistencia alimentaria, vales de ayuda de vivienda y programas que subsidian el elevado costo de los medicamentos, entre otros.
“Al penalizar a la gente que tiene algún tipo de subsidio público, alimentos, las estampillas para la comida o ese tipo de cosas, básicamente se está penalizando a los niños, el acceso a la comida de los niños, de las familias inmigrantes de bajos recursos", dijo Isaías Guerrero, de la organización Fair Immigration Reform Movement (FIRM).
El gobierno de Trump ya propuso en septiembre del año pasado una reglamentación para que a los inmigrantes que reciben legalmente beneficios públicos, como la asistencia alimentaria y los vales de ayuda de vivienda, se les pueda negar la residencia permanente.