México, invitado de honor a la feria árabe
Océano, Penguin Random, Era y Ediciones Tecolote son algunos de los sellos participantes, además de artesanos, músicos y bailarines
Entre miles de títulos en inglés y en árabe, hay una pequeña isla con libros en español, en la que se pretende reflejar una parte de la diversidad bibliográfica que define a la industria editorial mexicana, aunque también hay artesanos de Olinalá y músicos y bailarines de Oaxaca.
Aquí lo más importante no dejan de ser los libros, aun cuando pareciera que no solo la distancia geográfica o lingüística, sino incluso la cultural, se tornan barreras para el diálogo literario y editorial.
Sharjah había sido el principal emirato de la región, pero con el desarrollo de Dubái ocupó otro lugar, aún cuando se quedó con la etiqueta de ser la capital cultural de los Emiratos Árabes Unidos. Este año fue designada como la Capital Mundial del Libro, en gran parte porque alberga a un encuentro editorial y literario considerado el tercero más importante en el mundo.
Los organizadores de la Feria Internacional del Libro de Sharjah dicen que el año pasado recibieron a poco más de mil 800
editoriales de 77 países, con un millón 600 mil títulos en exhibición, incluidas 80 mil novedades.
La primera edición se realizó en 1982, bajo la guía y patrocinio del doctor Sheikh Sultan bin Muhammad Al-Qasimi, miembro del Consejo Supremo de los Emiratos Árabes Unidos.
La feria que recibió más de dos millones 300 mil visitantes en 2018, en esta ocasión tiene a México como país invitado de honor, con un programa organizado, en gran parte, por la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (Caniem) y la Secretaría de Relaciones Exteriores.
Entre quienes respondieron a la convocatoria hay tantos ellos de grandes grupos como Océano o Penguin Random, que editoriales independientes, entre ellas Círculo de Poesía, Ediciones Era, Petra Ediciones, Alboroto Ediciones o Ediciones Tecolote.
Odisea oaxaqueña
El viernes es día de descanso para los musulmanes, por eso las actividades iniciaron en la tarde. Una de las presencias que más llamó la atención fue la de un grupo de músicos y bailarines oaxaqueños que recorrió el Centro de Exposiciones de Sharjah.
Los integrantes del Ballet Folclórico Tradicional del Estado de Oaxaca vivieron una odisea: salieron el martes por la noche de Oaxaca y llegaron el viernes en la madrugada, aunque con el ánimo de seguir adelante.