Siboldi ya sonríe con este Cruz Azul
En los últimos tres partidos La Máquina ha revertido el mal comienzo; el entrenador advierte que puede dar más
Desde que llegó a Cruz Azul (Jornada 9, del Apertura 2019) Robert Dante Siboldi no había tenido unas semanas tan positivas como las tres últimas. Su Máquina poco a poco empieza a exhibir un estilo ofensivo y convincente de juego, al grado que los dos primeros tropiezos de la temporada parecen ya muy lejanos.
Sí, porque justo ahora se habla más del Cruz Azul goleador que ha metido nueve tantos en sus últimos tres compromisos (tres por partido) y ha sumado siete de sus últimos nueve puntos -y pudieron ser los nueve de no ser por la pifia de Corona ante Toluca-; en fin, La Máquina está a la alza y empieza a generar expectativas sobre sus alcances.
Sin embargo, aún es pronto para asegurar que el cuadro celeste ha pasado la tempestad. Ha mejorada mucho, pero aún tiene lapsos muy flojos como fue el primer tiempo ante Pachuca; eso sí, Siboldi tiene un plantel más balanceado que en sus primeras dos jornadas al recuperar poco a poco a sus elementos lesionados y con la incorporación de sus refuerzos. Incluso, la mejor noticia para este Cruz Azul es que ha trabajado con la base que hizo la pretemporada y los refuerzos están a la espera de ganarse un lugar.
Un equipo sin techo
Después de iniciar con dos derrotas consecutivas este Clausura 2020, Robert Dante Siboldi sabía que una tercera era inadmisible y casi su puerta de salida. Antes del crucial duelo frente a Santos, el uruguayo dijo con toda la certeza del mundo: “necesitamos un triunfo que nos dé credibilidad deportiva”.
El triunfo llegó y Siboldi empezó a trabajar con menos presión. Encontró un once titular, un sistema muy definido (4-4-2) y jugadores que empezaron a mostrar su mejor versión de juego, incluso, el juvenil Santiago Giménez empezó a demostrar su valía al grado que hoy tiene sentado al argentino Lucas Passerini.
Sí, La Máquina que suele ser un equipo tan emocional, hoy está viviendo buenas semanas y eso se refleja en el terreno de juego; sin embargo, lo más importantes es que llegue a consolidarse, por eso mismo Siboldi mantiene la ecuanimidad.
Acostumbrado a la crítica, asegura con firmeza que siempre ha sido demeritado en toda su carrera, pero él con resultados ha demostrado su capacidad: “Siempre empiezo con esa sensación de que no soy el indicado, yo primero me la creo y después vienen los resultados”.
Y advierte que su Cruz Azul aún no ha llegado al límite: “Vamos en ascenso, decir un porcentaje no sabría decir cuál, pero vamos en el camino y este equipo no tiene techo, tenemos mucho que dar todavía y en la medida que tengamos acumulación de entrenamientos y partidos, este equipo se va a ver mejor”.