Arendt-Heidegger: el amor acaba
Gamés informa: los párrafos que siguen son la última parte de su telenovela filosófica “Arendt y Heidegger”; en el Día del Amor y la Amistad, Gilga les tiene malas noticias: el gran amor siempre es desdichado
Los subrayados provienen de Hannah Arendt, una biografía
(Ariel. 2019)
Gil cerraba la semana como recién salido de la agencia, con fragancias de lujo y novedad, motor impoluto y deseos intocados por la desilusión. Gamés informa: los subrayados que siguen son la tercera y última parte de su telenovela filosófica “Arendt y Heidegger”. En el Día del Amor y la Amistad Gilga les tiene malas noticias: el gran amor siempre es desdichado. Los subrayados provienen de Hannah Arendt, una
biografía (Ariel. 2019). Aquí vamos: Heidegger tiene la impresión de que el mundo se le cae encima cuando, en octubre de 1927, se entera, durante una conversación aparentemente banal y amistosa con Jaspers, en la que intenta de forma desesperada y sin decirlo abiertamente obtener noticias de Hannah, de que ella se ha comprometido (…). Heidegger se va a buscarla por las calles de Heidelberg. Le suplica al destino que provoque un encuentro. El destino tiene alma de piedra. Ya no sabe a dónde dirigir sus pasos. Camina largo tiempo invocando su presencia. Finalmente decide recoger velas. Su mujer y sus dos hijos lo esperan en Marburgo. Allí recibirá una carta de Hannah donde admite expresamente que se ha comprometido. Le cuesta decírselo, le duele imaginarse su reacción como si se tratara de una traición por parte de ella. Él le responde que le agradece su franqueza, aunque hubiera preferido que se lo dijera de viva voz, y acusa de golpe “el único camino que se abre ahora ante mí es trabajar encarnizadamente con el fin de hallar un desvío a la nostalgia que tan cruelmente siento de ti y de tu profunda alegría”. En este juego perpetuo del escondite y de las connivencias secretas, donde el amor retumba como la unión de las almas y la fusión de las mentes, cada uno de ellos reconocerá, hasta su último aliento de vida y recíprocamente, su deuda respecto al otro, el Otro, el artífice de la revelación y de la apertura del mundo. Dar y recibir, recibir y dar. Esta historia entre Hannah y Martin trata de la vida y de la muerte. Por la vida y por la muerte. No ser en este mundo sin que cada uno conceda al otro el derecho de ser también. Hannah le confiesa a Martin el peso de su soledad, cuán arduamente solitaria se siente desde la ruptura. Termina su carta a Martin con estas palabras: “Y si Dios lo quiere, te amaré mejor después de la muerte”. 1933 será el año en que Arendt definitivamente rompa con Heidegger. Intentemos precisa r la cuestión recurriendo al método que ella reivindicótoda su vida: tratar de comprender, no de juzgar a partir del hoy en día .¿ Con qué derechopodría hacerlo yo, que nací después de la guerra y formo parte de una generación educada en la admiración de la Resistencia y en recuerdo incesante del recuerdo de la Shoah? De nada sirven las astucias, las anatemas ni los rodeos. Sí, Heidegger se hace nazi y acepta el puesto de rector de la Universidad deFri burgoen abril de 1933. Pronuncia discursos nazis. Ensucia su vocabulario y su pensamiento. Cae. Su lenguaje cae. Su pensamiento también. El 6 de enero de 1934, Heidegger declara que la universidad se ha convertido en la más eleva da escuela política del pueblo (…). Lanza el proyecto de un puente viviente entre el trabajador manual y el trabajador intelectual y apela a la creación de esta nueva comunidad que constituye el pueblo alemán. “Por el hombre de este querer inaudito, por nuestro Führer, Adolf
Hitler, un triple Sieg Heil.”
Sí: los viernes Gil toma la copa con amigos verdaderos. Mientras el mesero se acerca con la charola que soporta el Gelnfiddich 15, Gamés pondrá a circular las frases de Edith Wharton por el mantel tan blanco: Hay dos maneras de difundir la luz: ser la vela o el espejo que la refleja.