Tres teibols para llevar y uno para comer aquí
Veo que el ex subcomandante Marcos, hoy sup
Galeano, me cita en su carta de quejumbres borrascosas contra el INE y la SRE por toda la serie de complejas tramitologías a las que se han sometido a los zapatistas que irán a las Europas a tirar sus netopías. Ya se sabe, los pueblos indígenas son siempre el último eslabón de la cadena alimenticia (los obstáculos ya se retiraron por orden del sátrapa de Macuspana que, seguramente, les va a tender una emboscada en
Champs-Élysées). Y me cita en la burla del Ta tan kaCórd ova, alegando que también lee la p re ns afifí, como si MILENIO fuera puramentefifí aunque hay notablesfifís entres uscomentócratas, supongo que para que no anden diciendo que el viejo guerrillero nada más lee The Economist, New York Times y El País, plataformas fifís aunque no tan fifís como los medios
wanabí realmente fifís como Ladillus-Reforma, que hacen cera y pabilo en las mentes inocentes de nuestros millennials.
A lo mejor no lo sabe el subcomanche, pero muchos millennials sean daban quejando porque nadie les explicó que la alianza por la que vota ron, el P RIA N Ch u, portaba un ADN profundamente me di eval,homofóbico, clasista, antiabortista y en contra de los derechos de la comunidad LGBT que te metas Teté. Y cuyos logros podrían ser echados para atrás por estos yunquistas-inquisitoriales que buscan regresara México al siglo XVI. Oséase que a pesar de sus estudiosen escuelas de élite, la fuerza des informada mil len ni al cayó en el garlito ultraderechoso por sus arrebatos anticuatroté. Digo, es normal que no se sientan incluidos por AMLO y sus secuaces, y hasta los vean como un montón de nacos sueltos en Beverly Hills, sobre todo por acusarlos de aspiracionales (si me dijeran wanabí me sentiría insultado, pero aspiracional casi es un elogio), pero la presencia de Margarita Z avala, heredera de las maravillas de la Madre Con chita, tendría que haberles dado una pista.
Ahora en Sinaloa, ante la votación sobre los derechos del matrimonio igualitario a propuesta de Morena, los
diputeibols prianistas ante la derrota se salieron indignados. Unos decían que se fueron al baño como es costumbre (remember Paoli Bolio), pero yo creo que se fueron a gritar “¡Ánimo, Montana!”, a ver si podían organizar una de esas orgififiestas donde piden cuando menos tres
teibols para llevar y uno para comer allí.
Ese, mi sup, ¡a ver si los herederos del Croquetas no se jalan al Tacho pa’l reventón!
Si me dijeran me sentiría insultado, pero aspiracional casi es un elogio