Lo que hay que hacer
En medio de la nebulosa actual del crimen desorganizado y la remilitarización de Chiapas, lejos de la efervescencia electoral ya desatada y disparatada, el EZLN alista en algún lugar de la selva lacandona la próxima celebración de los 30 años de su alzamiento. Como preámbulo de la efeméride, retomo parte de una entrevista que le hice hace tiempo al subcomandante Moisés, líder de la organización.
—¿Qué es lo bonito de ser zapatista? —Lo bonito es que para ser zapatista no hay que venderse, no hay que rendirse y no hay que claudicar, eso es lo bonito. Ahí es donde mueres por tu pueblo, luchas por tu pueblo, donde vas a ver si es necesario de dar la vida o que hay otra forma de que tienes que ganar lo que quieres, porque así como esto, llevamos muchos años como estamos y no estamos tirando tiros, sino es la guerra política, la guerra ideológica la que tenemos y que hay que saber pelear y hay que saber ponerla en la práctica, porque no es lo mismo que un enfrentamiento, pues no, pero lo vamos ir haciendo en la práctica, no es nada más decir ‘eso es lo bonito’, tienes que dar valor a tu palabra para hacerlo. Hay que decirlo y hacerlo.
—¿Y lo duro?
—Lo duro de ser zapatista es organizarse, porque es que estamos allá donde alguien nos dice que hay que ser así, que no hay que ser así y que mejor hazlo así…hay que encontrar entonces
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“Lo bonito es que para ser zapatista no hay que venderse”
el liderazgo, como se dice. Lo duro es eso: hay que ponerse de acuerdo y el problema es que tú dices una cosa y yo digo otra cosa y el otro otra y así, entonces, para llegarse a acuerdo, eso es lo duro, porque a final de cuentas todos queremos que se haga según nuestra propuesta.
A nosotros nos sale siempre el común de cuál es el mejor, pero bueno, vamos a ir aprendiendo también siempre, y los compañeros y las compañeras de los pueblos zapatistas lo están demostrando que sí. No es cosa de que tengas mucho estudio y sepas, pues no, es la realidad que vas viendo… No estoy diciendo que no sirve el estudio, sí que sirve, porque también eso ayuda a estudiarlo, el qué hacer, cómo hacer, pero meramente en la práctica de cómo
_ vamos a hacer el cambio, es primero ver cómo está la situación y pensarlo en común. ¿Qué se puede hacer?, ¿cómo se puede hacer y poner la práctica? Eso es lo duro, organizarse, pero es lo que hay que hacer.